El grupo parlamentario de Junts ha presentado varias propuestas en el Congreso con el fin de que Catalunya cuente con un distrito universitario independiente, administre directamente las becas y pueda restringir el número de estudiantes no residentes en sus universidades.
Las propuestas de Junts, detalladas por Europa Press, argumentan que la estructura actual del distrito universitario único no permite a la Generalitat adaptar el acceso universitario a sus particularidades sociales, sanitarias y lingüísticas, por lo que solicitan cambios para favorecer a los estudiantes de la región.
“La inmediata adopción de esta medida es imprescindible para garantizar el derecho de acceso a los estudios universitarios de los estudiantes catalanes en los próximos años, así como para asegurar el retorno a la sociedad catalana de la inversión pública realizada por las instituciones públicas catalanas en formación universitaria y la preservación del uso efectivo del catalán como lengua vehicular en los estudios y las prácticas”, señalan desde Junts.
Actualmente, el partido liderado por Carles Puigdemont solicita que, hasta que se realice la reforma legislativa, se reserve el 80% de las plazas para estudiantes formados o residentes en Catalunya, especialmente en áreas sociosanitarias. Adicionalmente, piden que la Generalitat pueda implementar pruebas de aptitud personal en catalán para los aspirantes a estudios de Medicina desde el próximo curso académico.
Junts también desea que el Gobierno permita a Catalunya evaluar “el origen del alumnado de medicina, el uso de las lenguas docentes y el grado de arraigo profesional posterior, como base para planificar la formación y las necesidades sanitarias en Catalunya”.
En otro frente, la formación reclama la transferencia de la gestión de becas universitarias y los fondos correspondientes en un plazo de seis meses para establecer un sistema de becas salario que garantice el acceso equitativo a todos los estudiantes catalanes.
Por otro lado, Junts exige al Gobierno que “transferir anualmente 150 millones de euros para la financiación de la investigación y el desarrollo en Catalunya”, denunciando que en 2024 sólo se transfirió una parte de estos fondos, dejando un déficit de 109,3 millones de euros.
Finalmente, solicitan que se priorice a Catalunya en la ubicación de futuras infraestructuras científico-técnicas estatales, basándose en su contribución relativa a la ciencia y la innovación en comparación con el resto del Estado.
