Este miércoles, representantes de Junts, ERC, los Comuns y la CUP han formalizado ante el Parlament una proposición de ley que ha sido enviada a la Mesa del Congreso de los Diputados con el objetivo de anular los Decretos de Nueva Planta, establecidos por Felipe V entre 1707 y 1716.
En una comparecencia ante los medios, los grupos políticos, acompañados por la Associació de Juristes Valencians, han argumentado que esta medida busca revertir la abolición de las constituciones y sistemas legales de los antiguos reinos de la Corona de Aragón, que incluyen Aragón, València, Mallorca y el Principat de Catalunya.
La proposición solicita de manera explícita la derogación de los decretos, calificándola como «un ejercicio de reparación histórica y de justicia institucional».
RÉGIMEN ABSOLUTISTA DE FELIPE V
Los partidos proponentes describen que los Decretos de Nueva Planta impusieron un régimen unificador de carácter absolutista y centralizador, reemplazando las instituciones locales por un modelo administrativo al servicio de los Borbones. Según ellos, esta acción resultó en la pérdida de derechos colectivos y de la identidad política y cultural de las regiones afectadas.
Asimismo, critican que, aunque la Constitución de 1978 reconoció el carácter histórico de algunas nacionalidades y permitió cierto grado de autogobierno, no incluyó la derogación de los Decretos de Nueva Planta en su disposición derogatoria segunda, que solo abordó el régimen foral de País Vasco y Navarra.
Por todo ello, exigen al Estado la derogación de los decretos y la promoción de «una declaración institucional de carácter conmemorativo como acto simbólico de restitución de la memoria histórica y jurídica».
