Verónica Martínez Barbero, portavoz de Sumar en el Congreso, ha expresado su apoyo para que el próximo martes se admita a trámite la proposición de ley orgánica del PSOE y Junts que busca delegar competencias en materia de inmigración a Catalunya. Está segura de que no surgirán diferencias significativas entre los miembros de la coalición al respecto.
En el momento de su registro, la propuesta enfrentó críticas desde Compromís por considerar que el texto se alineaba con posturas de la «extrema derecha y el racismo», según expresó el diputado de Sumar, Alberto Ibáñez. Por otro lado, IU estaba a favor de tramitar la ley, aunque solicitaba eliminar ciertas expresiones consideradas «xenófobas» durante el proceso de enmiendas. Más Madrid, por su parte, cuestionó el precedente que podría establecer el texto, aunque no clarificó su postura de voto.
Ante las críticas, Martínez Barbero defendió en una rueda de prensa que, a pesar de las diferencias menores o dudas técnicas entre los miembros, apoyan el traspaso de competencias a las comunidades autónomas en materia de inmigración, lo cual es «perfectamente constitucional».
También rechazó la idea de que Sumar pudiera votar en contra como represalia hacia Junts, después de que este partido se uniera a PP y Vox para rechazar el proyecto de ley de reducción de jornada. «No vamos a darle la espalda a la ciudadanía catalana que busca más autogobierno solo porque Junts se oponga a una medida que también respalda el 72% de sus votantes. No somos tan incongruentes», afirmó Martínez Barbero.
Además, destacó su interés en avanzar en la Iniciativa Legislativa Popular para la regularización de medio millón de migrantes irregulares. Desde la dirección del grupo, se señala que debatirán una posición conjunta la próxima semana, y aunque no descartan que algún diputado pueda sugerir la abstención, el socio minoritario no provocará el descarrilamiento de la norma.