En una sesión del Parlamento de Navarra, la presidenta María Chivite ha afirmado que su ejecutivo es “el más transparente de la historia” tras la divulgación de varios informes sobre adjudicaciones públicas. Frente a ella, UPN ha cuestionado su liderazgo, sugiriendo que “cualquier presidente decente se habría marchado hace mucho”.
Chivite, quien acudió al parlamento a solicitud de UPN, junto a varios consejeros, ha remarcado que han presentado alegaciones a la Oficina Anticorrupción y al propio Parlamento, destacando la falta de un trámite de alegaciones en los informes previos.
Durante la sesión, Javier Esparza de UPN confrontó a Chivite sobre la posible alegación para liberar a Santos Cerdán, acusándola de actuar en su beneficio desde sus inicios políticos. Además, criticó la solidez del discurso de Chivite basándose en los informes de Anticorrupción sobre la obra de Belate, declarada nula legalmente.
Chivite respondió a estas acusaciones, negando cualquier vinculación de Cerdán con los problemas legales de Belate y criticó a Esparza por comenzar la sesión con falsedades. Además, explicó que tras conocer un informe de la UCO, solicitó auditorías adicionales sobre las obras adjudicadas a Acciona-Servinabar.
La presidenta reafirmó la honestidad y transparencia de su gobierno, mencionando una futura modificación en la Ley Foral de Contratos. En contraste, Esparza describió su gestión como manchada por la corrupción. Ainhoa Unzu, del PSN, y otros parlamentarios de diferentes grupos también intervinieron, debatiendo sobre la conducta del gobierno y la intencionalidad política de las acusaciones de UPN.