En una reciente sesión de la comisión de investigación del Parlamento de Navarra, Pablo González, vocal de la mesa de contratación para la ampliación del túnel de Belate, reveló que las tensiones entre Jesús Polo, presidente de la mesa, y Lorenzo Serena, el secretario, generaron un ambiente conflictivo que interrumpió el proceso de decisión. González describió esta situación como una «guerra» que entorpeció las operaciones de la mesa.
«Parecía que tanto Lorenzo como Jesús no acercaban posturas. El resto lo intentaba con más o menos empeño, pero la guerra fue entre los dos y fue lo que bloqueó la mesa», explicó González, respondiendo a las preguntas de UPN. A pesar de las diferencias, aseguró no haber recibido presiones ni sugerencias por parte de ningún miembro de la mesa y negó cualquier tipo de injerencia política en su trabajo.
Respecto a los rumores de que la adjudicación estaba predestinada a Acciona-Servinabar, González fue claro: «Los rumores están siempre ahí, pero eso es ruido de fondo, no hay que prestarle atención». Además, señaló que la primera vez que escuchó sobre estos rumores fue por el secretario de la mesa y subrayó la independencia del proceso de puntuación entre los técnicos, desmintiendo que hubiera un procedimiento fijo para emitir valoraciones antes de cada reunión.
Finalmente, destacó la importancia de la integridad en el proceso de votación, indicando que no hay manera de controlar el orden de votación y que confía en la profesionalidad de sus colegas. «Yo no sospecho de ninguno de mis compañeros, hago mi trabajo lo mejor posible todos los días y entiendo que los demás compañeros hacen lo mismo», concluyó González.
