QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
En una ceremonia solemne realizada en el salón de plenos, el Parlamento de Navarra ha entregado la Medalla de la Cámara al pueblo palestino, reconocimiento recogido por Husni Abdelwahed, embajador del Estado Palestino en España, y Ola Arafat, presidenta de la Asociación Salam Gaza Nafarroa.
Este galardón, la distinción más prestigiosa del legislativo foral, se otorga para ‘reconocer y agradecer a todas las personas, entidades, colectivos e instituciones de Navarra que se han movilizado contra la barbarie cometida contra Palestina’, según el acuerdo aprobado.
Unai Hualde, durante su discurso, destacó el amplio movimiento social e institucional en Navarra que ha surgido ‘para denunciar la barbarie, para mostrar solidaridad, para pedir justicia, para demandar que se dejara entrar ayuda humanitaria y, sobre todo, para exigir el fin de la acción armada del Gobierno de Israel contra la población de Palestina’. Además, enfatizó que ‘es imposible escenificar en un solo colectivo o en una sola persona’ ese movimiento.
Hualde también agradeció al embajador palestino por su presencia, destacando que representa ‘a todo el pueblo palestino que queremos de alguna manera tener presente en el acto de hoy’. Reconoció igualmente el trabajo de la Asociación Salam Gaza, que ha estado ‘en primera línea organizando y canalizando la ayuda humanitaria’, y subrayó la importancia de no olvidar la tragedia que continúa en Gaza, donde la población necesita ayuda humanitaria y condiciones mínimas para reconstruir sus vidas.
‘Hay una canción que dice lo importante que es que la guerra, que la injusticia, que la brutalidad de pisar la inocencia de la gente no nos sea indiferente’, concluyó Hualde, quien además agradeció a todos los navarros por su solidaridad y apoyo.
Posteriormente, Yolanda Ibáñez y Adolfo Araiz leyeron el acuerdo de reconocimiento y agradecimiento, y Unai Hualde entregó las Medallas a Husni Abdelwahed y Ola Arafat, quienes expresaron su gratitud y el deseo de continuar luchando por justicia, paz y futuro para los niños de Palestina y del mundo.
Ola Arafat dedicó la medalla a todos los que trabajan por ayudar al pueblo palestino y subrayó la importancia de no ser indiferentes ante el sufrimiento. La ceremonia también contó con actuaciones musicales que enmarcaron el evento con solemnidad y esperanza.
