La diputada Aina Vidal de los Comunes y Alberto Ibáñez de Compromís, ambos integrantes del Grupo Parlamentario Sumar, han expresado su rechazo a los actos de violencia «racista» en Torre Pacheco, Murcia.
«No es casualidad que la misma semana que Vox flirteara con el Trumpismo prometiendo más devoluciones masivas de vecinos españoles, aparezcan grupos de cacería contra vecinos magrebís. Vox apunta y los nazis disparan», criticó Vidal durante una conferencia de prensa en el Congreso de los Diputados este martes.
Vidal ha solicitado la aprobación de la propuesta de ley para la regularización de migrantes, destacando que son trabajadores esenciales, como los que laboran en la huerta de Murcia.
Además, anunció que el Grupo Plurinacional Sumar promoverá una Comisión de estudios sobre el racismo estructural en España. «No es una Comisión trabajada en caliente, es una Comisión que pretende evaluar todos los datos y discriminaciones que tenemos y que sufren, en este caso, tanto las comunidades migrantes como también las personas racializadas que han nacido en este país pero que se les persigue y se les discrimina», explicó.
«Queremos escuchar, además, y queremos trabajarla de la mano, no solo con las entidades especializadas que llevan años y décadas trabajando y denunciando este racismo sistémico y que, por lo tanto, hay mucho trabajo hecho al respecto que no vamos a obviar, sino que también esto es, en este caso, una invitación a todos los partidos demócratas que entiendan que esto es un problema, es una necesidad de país», continuó Vidal.
Vidal ha comentado que han recibido «buenas reacciones» de los partidos políticos respecto a esta Comisión. «Hay que pasar del diagnóstico a la acción, el racismo mata y por eso desde el Grupo Plurinacional vamos a estar muy activos para erradicar el racismo», agregó.
Vidal también está «esperando a que alguien desde el partido Vox condene las cacerías que se están convocando estos días en Torre Pacheco».
Por su parte, el diputado de Compromís también ha condenado «rotundamente la violencia institucional, racista y los escuadristas neonazis machitos que obedecen a una estrategia organizada, subvencionada y coordinada por la extrema derecha».
«No existe relación ninguna entre migración y delincuencia, por mucho que Vox y el Partido Popular intenten engañarnos», afirmó Ibáñez.
Ibáñez criticó que Santiago Abascal, presidente de Vox, «calla y su silencio no significa otra cosa que complicidad con los violentos, con los racistas y con el fascismo». «Calientan la violencia y con su silencio son corresponsables», advirtió.
«El fascismo nunca es una opinión, es un crimen. Y en una democracia sana y consolidada no se puede permitir la coexistencia de partidos filofascistas», declaró Ibáñez, quien también subrayó la necesidad de un debate urgente sobre la ilegalización del fascismo en España.
Ibáñez sostuvo que en un Estado democrático y de derecho «no se pueden tolerar los discursos que calientan la violencia y que con su silencio son corresponsables», haciendo referencia a la formación de Abascal.