La representante de Sanidad del PP en Les Corts, Nieves Martínez, ha subrayado que la Conselleria de Sanidad siempre prioriza las cirugías basándose en el riesgo vital de los pacientes y ha enfatizado que para ellos un paciente no es un número. Nuestra máxima prioridad es salvar vidas, después resolver problemas y, en última instancia, hacer números, que es a lo que se dedicaba el gobierno del Botànic, afirmó.
En una declaración, criticó que el Botànic se centraba en disminuir las listas de espera de manera general, sin considerar otros aspectos, resultando en más operaciones de cataratas y juanetes, especialidades muy demandadas, mientras que los casos de prioridad 1 duplicaban la espera máxima permitida por la normativa estatal.
Según un decreto de mayo de 2003, se establecen los plazos máximos y la clasificación de los pacientes en el Sistema Nacional de Salud, permitiendo una espera de hasta 30 días para intervenciones de pacientes de prioridad 1, los casos más graves.
Desde el PP no ocultamos nada y no nos dedicamos a hacer trampas, los datos hablan por sí solos, y en solo dos años el Consell de Carlos Mazón ha logrado reducir el tiempo de espera de 61 días en junio de 2023 a 27 días en 2025, una mejora notable, destacó Martínez. Además, el número de pacientes de prioridad 1 activos ha disminuido de 2.967 a 1.007 en este período, una reducción de más del 66 por ciento, lo que representa un avance significativo en el acceso a la atención sanitaria.
En cuanto a la prioridad 2, para pacientes con una demora permitida de hasta 90 días, se han visto avances importantes: el número de pacientes activos ha disminuido de 17.214 en 2023 a 11.189 en 2025, y la espera estructural en este grupo también ha bajado, de 81 días en 2024 a 77 días en 2025.
Por último, en el grupo de prioridad 3, que incluye los casos menos urgentes, se observa una tendencia a la baja, pasando de 57.026 pacientes en junio de 2024 a 56.442 en el mismo periodo de 2025.
La diputada del PP concluyó que los datos reflejan el compromiso de la Generalitat con la atención prioritaria de los casos más críticos y una mejora directa en la calidad asistencial, basada en criterios sanitarios y no estadísticos.