El director del Centro de Investigación y Proyectos, Innovación y Sostenibilidad, Miguel Ángel Artacho, ha defendido que el cambio climático figura entre los factores que desencadenaron la dana del 29 de octubre de 2024, que devastó gran parte de la provincia de Valencia y causó 230 fallecidos, al estar vinculado al incremento de la intensidad y la frecuencia de las inundaciones.
Así lo ha manifestado en su comparecencia de este lunes por la tarde ante la comisión de investigación sobre la dana en Les Corts, donde ha remarcado que los científicos no tienen “ninguna duda” y que existe un amplio consenso en atribuir al cambio climático el aumento de la virulencia y la recurrencia de estos episodios. Como “segunda causa” ha situado el crecimiento de la población y el avance de la urbanización.
Artacho ha lamentado que la ciudadanía viva “completamente de espaldas a la realidad de un problema que no es para nada menor: una mala gestión de los residuos puede llevar a problemas serios de salud, de seguridad e impactar gravemente al medioambiente”. Ha subrayado que tras una catástrofe natural “siempre hay una ingente cantidad de residuos” y ha recalcado que está “demostrado” que una correcta gestión permite “abaratar costes, recortar plazos y agilizar muy mucho la recuperación de la zona” afectada.
Gestión de residuos y margen de mejora
En cuanto al tratamiento de los residuos, Miguel Ángel Artacho ha explicado que se sigue una guía internacional aprobada en 2011 por tres instituciones, aunque ha insistido en que siempre “hay margen de mejora” porque “la perfección no existe”. Entre los puntos a corregir, ha mencionado la conveniencia de depositar los residuos en canteras en lugar de depender de instalaciones de otras provincias o comunidades autónomas, así como una mejor gestión de elementos como los vehículos siniestrados, que deberían haberse trasladado a centros autorizados para su descontaminación.
El investigador ha descrito que se ha dado “una gobernanza multinivel” que “se lleva mal” con la improvisación y ha generado “muchos problemas”. A su juicio, ello ha derivado en “un proceso de idas y venidas entre el Gobierno central y la Generalitat”.
“Yo vengo de la ciencia, soy un hombre de academia y lo que quiero es que ustedes, por favor, colaboren”, ha pedido, aludiendo a la comisión mixta entre el Gobierno y la Generalitat para lamentar: “Me entristece enormemente que no hayan sido capaces de ponerse de acuerdo, de trabajar juntos, arrimar el hombro y hacer lo que tienen que hacer, porque ustedes están al servicio de todas las personas que formamos parte de esta comunidad”.
Planes previos, Cecopi y formación técnica
En su opinión, la gestión de los residuos habría sido más eficaz si se hubieran dispuesto planes de gestión previos a las catástrofes, que permiten ahorrar tiempo y recursos, ofrecer una respuesta “más resiliente” y lograr una recuperación “mucho más rápida”.
Además, el director del Centro de Investigación y Proyectos, Innovación y Sostenibilidad ha defendido que en órganos como el Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) debe participar un especialista en gestión de residuos: “Eso es obligatorio porque, si no, las decisiones se toman de espaldas y no se tienen los criterios de estos señores que saben de residuos y difícilmente se puede dar una respuesta acorde a lo que la gestión de residuos necesita”. También ha considerado imprescindible reforzar la formación de los técnicos municipales en materia de gestión de riesgos.
Igualmente, ha puesto el foco en la necesidad de simplificar el entramado normativo y de potenciar la investigación, la innovación y la cooperación institucional, junto con una mejora de la educación y la concienciación social. Ha instado a “ser conscientes del riesgo”, recordando que hay “muchas personas viviendo en zonas inundables” en la Comunitat. A este respecto, ha advertido de que “el verdaderamente dueño del territorio es el agua y, cuando quiere, vuelve y reclama su sitio con las escrituras en la mano”.
Sobre el lago de l'Albufera, Miguel Ángel Artacho ha denunciado el “maltrato” que ha sufrido durante “muchos años”, al que se ha sumado el “durísimo golpe” de la dana, y ha reclamado una mejora en su gestión “multinivel”.
También ha sintetizado los fallos que, a su entender, quedaron al descubierto con la gestión de la dana: “Falta de información y datos fiables, deficiencia en la comunicación, planificación operativa y control de la gestión del residuo, problemas organizativos y de coordinación institucional y restricciones normativas legales y financieras”.
Posturas de los grupos parlamentarios
En el turno de los grupos, José Mª Llanos (Vox) ha defendido que lo que existe son “ciclos climáticos” y ha sostenido que “las 230 víctimas que no las produce ni el cambio climático ni el incremento demográfico o una excesiva urbanización, tienen más que ver con una falta de información y de medidas preventivas”. Ha señalado que las obras estructurales se esperan “como agua de mayo” y ha preguntado si el Gobierno está “enterrando todavía” vehículos no retirados.
Desde Compromís, Isaura Navarro ha censurado que “Vox privatiza el servicio de gestión de l'Albufera del Ayuntamiento de València con un contrato de un millón de euros” y ha criticado la supresión de la Agencia Valenciana de Residuos y Economía Circular impulsada por el Botànic, que, ha dicho, era un “organismo fundamental” y “no suponía ningún corte a las arcas públicas”. El investigador ha lamentado igualmente la ausencia de este organismo.
Por su parte, Alicia Andújar (PSPV) ha recordado que “la unidad de análisis que comenzó a poner en marcha el Botànic en mayo de 2023 desgraciadamente a día de hoy todavía no está puesta en funcionamiento”, cuando habría permitido elaborar “estimaciones sobre la afección territorial de la emergencia y su posible evolución proponiendo posibles medidas de protección a la población, infraestructuras y zonas vulnerables”. Ha sugerido integrar la gestión de residuos en esta unidad de análisis y Artacho ha mostrado su respaldo a contar con dicha estructura.
En respuesta, Verónica Marcos (PP) ha argumentado que esta unidad de análisis “carecía de personal autorizado y cualificado” y ha avanzado que la Generalitat “está preparando el plan integral de residuos y contará con un apartado específico de catástrofes”.
Responsabilidad compartida y prevención
En su intervención final, el investigador ha advertido de que “la previsión es que la intensidad y la frecuencia de las inundaciones va a crecer” y que “nos la deberíamos creer todos para que no tengamos que lamentar 230 víctimas mortales nunca más”. A su entender, “todos somos corresponsables de lo que ha pasado” y si “alguien no se siente, para mí es un desaprensivo” porque lo ocurrido “supone el fallo de toda la sociedad en su conjunto, la academia también”.
Artacho ha enfatizado que “la prevención pasa por medidas estructurales y no estructurales”, aunque de estas últimas “no habla nadie”. Ha considerado que la gestión de residuos “es una de las principales que habría que acometer”, junto a disponer de un “buen sistema de emergencias”. Asimismo, ha admitido que se tardó en reaccionar porque la respuesta fue esencialmente reactiva.