El secretario general del grupo parlamentario de Vox en el Congreso, José María Figaredo, ha descrito las recientes modificaciones estructurales del PSOE, que buscan hacer frente al escándalo que involucra a Santos Cerdán en el ‘caso Koldo’, como un simple «maquillaje» para «tapar» los actos de corrupción. Sin embargo, ha recalcado que el problema permea a todo el partido, describiéndolo como «está involucrado en un sistema mafioso total».
Este viernes se han anunciado los nombramientos previos al Comité Federal del sábado, incluyendo a Rebeca Torró, actual secretaria de Estado de Industria, como nueva secretaria de Organización del PSOE; a Montse Mínguez, diputada del PSC y miembro de la Ejecutiva del PSOE, como nueva portavoz del partido; y a Emma López, previamente secretaria de Política Económica y Transformación Digital, quien asumirá una nueva portavocía adjunta.
«Sabemos que no son más que cambios cosméticos, el PSOE intenta eliminar o borrar la corrupción intrínseca, pero no es más que maquillaje, es una forma de taparla», afirmó Figaredo durante una rueda de prensa en el Congreso.
Figaredo, quien también es el portavoz económico de Vox en la Cámara Baja, ha señalado que algunos de los nuevos cargos están implicados en esquemas de corrupción, refiriéndose a informaciones que vinculan a Torró con la adjudicación de contratos a empresas relacionadas con Santos Cerdán. También ha expresado su descontento por la continuidad de ciertos miembros de la anterior ejecutiva en posiciones de liderazgo.
Por lo tanto, concluye que los esfuerzos del PSOE por renovarse son infructuosos. «Están necesariamente involucrados, el PSOE entero está involucrado en un sistema mafioso total, y, por muchos cambios estéticos que quieran hacer, la realidad es la que es», concluyó Figaredo.