Turner, subsidiaria de ACS en Estados Unidos, ha sido seleccionada para erigir un moderno centro de datos en Lancaster, Pensilvania, contando con fondos que superan los 6.000 millones de dólares (aproximadamente 5.130 millones de euros) aportados por el desarrollador CoreWeave, especializado en inteligencia artificial.
En colaboración con la empresa local Wohlsen, Turner desarrollará este proyecto de 100 megavatios (MW), con planes de expansión futura hasta 300 MW. Este desarrollo posicionará a la instalación entre los primeros centros de datos de gran escala en la región.
Impacto regional y declaraciones
«El data center de Lancaster contribuirá a posicionar a Pensilvania y a la región del Atlántico Medio en general como un centro estratégico para la economía global de la IA, gracias al equipamiento de última generación adaptado a las avanzadas cargas de trabajo de la IA», destacó ACS en un comunicado.
Durante un evento sobre Energía e Innovación en Pensilvania, Michael Intrator, CEO de CoreWeave, anunció frente al presidente Donald Trump que la inversión en este proyecto superará los 6.000 millones de dólares.
Adicionalmente, Hochtief, otra filial de ACS pero de origen alemán, se ha hecho con dos contratos en Alemania por un valor total de 130 millones de euros. Estos incluyen la construcción de un centro de investigación para la Universidad de Duisburg-Essen y la transformación de una antigua fábrica en Krefeld en un espacio para eventos y conciertos.
















