Aena responde a Ryanair y sostiene que el alza de 0,68 euros por viajero representa la media en la totalidad de sus aeropuertos, aunque las tarifas fluctúan en función de las características específicas de cada uno.
Por ejemplo, para el aeropuerto de Valladolid, este incremento sería de 0,34 euros por pasajero y el coste adicional por cada persona en esta instalación, incluyendo el incentivo aplicable, sería de 1,9 euros.
En el caso de Tenerife Norte, el aumento para un vuelo peninsular operado por Ryanair sería de 0,43 euros por pasajero, con un coste total de 6,62 euros. Con los incentivos aplicados, este coste se reduciría a 4,6 euros por persona.
Según informan desde Aena, un avión de Ryanair con un 85% de ocupación tendría un coste de 12,64 euros en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, que se reduciría a 8,35 euros en Palma de Mallorca o Málaga-Costa del Sol, y a 5,27 euros en Valladolid.
Michael O’Leary, consejero delegado de Ryanair, declaró al ‘Financial Times’ que podría reducir otro millón de plazas en los vuelos a España el próximo verano si Aena no rebaja las tarifas aeroportuarias. Estos recortes se sumarían a los 800.000 asientos ya eliminados para este verano y al millón de plazas canceladas para la temporada de invierno en respuesta al incremento del 6,5% en las tarifas de Aena.
La semana pasada, la aerolínea anunció el cierre de su base en Santiago y la cancelación de todos sus vuelos a Vigo y Tenerife Norte, además de reducir su capacidad en Asturias, Santander, Zaragoza y Canarias. Esto se añade a los ajustes ya efectuados en otros aeropuertos regionales como Jerez y Valladolid, donde ha cesado operaciones. Si no hay otras compañías que asuman estos asientos, el recorte total de la capacidad aérea en España alcanzaría el 16%.
