Aena conservará sin cambios su propuesta de inversión de casi 10.000 millones de euros para el periodo 2027-2031, conforme al Documento de Regulación Aeroportuaria (DORA III), después de que el Congreso de los Diputados desestimara la enmienda que buscaba congelar las tasas aeroportuarias hasta 2031.
Esta resolución, tomada durante el procedimiento parlamentario de la Ley de Movilidad Sostenible, facilita que el Consejo de Ministros ratifique el plan sin alteraciones, acorde con la Ley del 15 de octubre sobre la adopción de medidas urgentes para el crecimiento, la competitividad y la eficiencia, tal como fue comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Con esta decisión parlamentaria, la entidad encargada de los aeropuertos en España confirma que su propuesta de inversiones para 2027-2031 se mantiene como estaba prevista inicialmente.
El pasado 18 de septiembre, Aena dio a conocer su plan de inversiones en la red de aeropuertos españoles, que ascenderá a 12.888 millones de euros para el lustro 2027-2031, de los cuales 9.991 millones son para inversiones reguladas en la vigencia del futuro DORA III.
Desde 2027, la empresa propuso incrementar la inversión regulada anual hasta alcanzar los 2.000 millones de euros, lo que representa un aumento de más de 4,4 veces respecto a la inversión máxima legal hasta 2025.
PULSO PARLAMENTARIO
El DORA III es un instrumento regulatorio esencial que establece las tarifas aeroportuarias y el plan de inversiones para los próximos años en España. Este plan incluye expansiones en centros como Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat, además de mejoras en sostenibilidad y capacidad para gestionar el incremento del tráfico aéreo post-pandemia.
La controversia surgió cuando el Senado, con el apoyo del Partido Popular (PP), Vox y Junts per Catalunya, aprobó una enmienda a la Ley de Movilidad Sostenible que establecía la congelación de las tasas hasta 2031.
Esta medida, promovida por la oposición como una barrera a los “abusivos incrementos” en los costes para aerolíneas y pasajeros, habría reducido significativamente los ingresos regulados de Aena y su impacto no se habría limitado solo a lo contable.
Aena advirtió en su comunicado del 5 de noviembre acerca de “graves consecuencias adversas” para su regulación económica y el sistema aeroportuario en general, incluyendo posibles reducciones en proyectos cruciales de modernización si se aprobaba la enmienda, “lo cual podría afectar negativamente a los territorios de España que albergan las infraestructuras”.
El gestor alertó que la enmienda introduciría incertidumbre regulatoria y jurídica en la economía española, “cuyos efectos tóxicos en Aena podrían reverberar en la comunidad financiera internacional y enturbiar la buena imagen y la probada seriedad económica de España”.
El mercado reaccionó y las acciones de Aena, cotizadas en el Ibex 35, cayeron un 5,07% al inicio del 7 de noviembre, hasta los 22,53 euros por acción, liderando las pérdidas del índice español.
Con la enmienda descartada, el expediente del DORA III vuelve al Consejo de Ministros para su aprobación definitiva. Aena, que administra 46 aeropuertos y dos helipuertos en España y tiene presencia en 15 aeropuertos internacionales, podrá continuar con su plan de inversión sin recortes. La empresa ha iniciado un periodo de consultas con las aerolíneas sobre su macroplan inversor.