Desde 2027, Alcoa enfrenta dos posibles rumbos para su planta en San Cibrao, situada en Cervo (Lugo): mantener en funcionamiento o deshacerse de la instalación de aluminio, y seguir operando o considerar la clausura de la fábrica de alúmina.
Estas opciones fueron presentadas por la corporación estadounidense durante una sesión para inversores (‘Investor Day’), evento que contó con la participación de William F. Oplinger, presidente de Alcoa.
Fuentes internas de Alcoa, consultadas por Europa Press, destacaron que estos son solo escenarios hipotéticos que están siendo evaluados, ya que existen ‘dos caminos’ para cada una de las plantas de aluminio y alúmina.
En dicho evento, Alcoa examinó la situación vigente, destacando que cuenta con ‘garantías razonables’ por parte de las autoridades españolas. A su vez, mencionaron un retraso en el reinicio de cubas, lo que ‘afecta las finanzas, pero se mantiene el plan para neutralizar los impactos’.
Por ahora, la estrategia de la empresa se centra en ‘reiniciar la fundición de manera segura, eficiente y rentable’ y ‘continuar evaluando cómo optimizar las operaciones’.
A corto plazo, Alcoa se propone ‘neutralizar el impacto financiero de las operaciones en España para finales de 2027’. También planea incrementar la inversión para expandir la balsa de lodos y mejorar la rentabilidad del aluminio para ‘compensar las pérdidas’ de alúmina.
Recientemente, la conselleira de Economía e Industria, María Jesús Lorenzana, se reunió con el comité de empresa de Alcoa en San Cibrao, junto con los alcaldes de Xove y Cervo, para revisar los trámites pendientes entre la compañía y la Xunta, destacando la urgencia de convocar de inmediato el comité de seguimiento.










