En la reciente Conferencia Internacional de Banca organizada anualmente por Santander, Ana Botín, presidenta ejecutiva de Banco Santander, ha destacado la insuficiencia de crecimiento global como el principal peligro para la estabilidad financiera mundial. Según Botín, las proyecciones indican que el crecimiento del PIB global será medio punto porcentual inferior en los próximos cinco años en comparación con periodos anteriores, lo que podría traducirse en 20 millones de empleos menos y una reducción de hasta 1,4 billones en la recaudación de impuestos.
“Es el mayor riesgo a la estabilidad financiera al que nos enfrentamos”, señaló Botín, subrayando la importancia de involucrar a los bancos en cualquier estrategia de reactivación económica. “Nosotros [los bancos] asignamos el capital mejor que los gobiernos”, añadió, resaltando el papel de las entidades bancarias en el liderazgo del crecimiento en Europa.
Botín también criticó la densidad normativa en Europa comparándola con Estados Unidos, donde se ha promovido la desregulación. “Los estadounidenses son capaces de decir desregulación, mientras que nosotros no podemos decir eso en Europa, decimos simplificación”, explicó. Además, enfatizó que la excesiva regulación está asfixiando la innovación en Europa: “La regulación mata la innovación en Europa”, afirmó Botín, advirtiendo que sin innovación no se puede lograr crecimiento.
Finalmente, Botín tocó el tema del euro digital, mencionando que, aunque su necesidad podría justificarse por la soberanía, los bancos ya están conectando digitalmente a los europeos sin necesidad de crear una nueva moneda digital.