Entre enero y marzo de 2025, la economía de Ecuador experimentó un aumento interanual del 3,4%, impulsado por la revitalización del consumo doméstico, la inversión y las exportaciones no relacionadas con el petróleo, de acuerdo con un comunicado emitido por el Banco Central de Ecuador.
En comparación con el último trimestre de 2024, el Producto Interno Bruto (PIB) ecuatoriano se incrementó en un 3,5%, siendo estimulado por los principales componentes del gasto: el consumo de los hogares (3,1%), la formación bruta de capital fijo (4,1%), las exportaciones (2,8%) y el gasto gubernamental (0,5%).
El consumo de los hogares evidenció un notable crecimiento del 7,1% en este trimestre, reflejando una mejora en la capacidad de gasto de los ciudadanos, mientras que la inversión en bienes de capital, crucial para sectores como la agricultura y la industria, se elevó un 6,7%.
Las exportaciones vieron un crecimiento del 2,7% hasta marzo en comparación al mismo período del año previo, gracias a la sólida performance de los productos no derivados del petróleo. Las importaciones, por su parte, se incrementaron en un 14,3% debido a un aumento en la adquisición de combustibles, bienes de capital y materias primas, esenciales para el repunte económico.
De los 20 sectores analizados, 13 mostraron crecimientos interanuales, lo que indica «una recuperación en la estructura productiva nacional», según señaló la entidad bancaria. La agricultura, ganadería y silvicultura registraron el mayor crecimiento en este período, con un aumento del 17,5%, seguidos por la pesca y acuicultura (12,1%) y la manufactura de alimentos (8,6%).