En Madrid, la Asociación Española de Compliance (Ascom) ha llevado a cabo la celebración del Día del Compliance Officer, insistiendo en la necesidad de equiparar la protección de estos profesionales con la de los informantes ante las represalias y los desafíos normativos, tecnológicos y éticos emergentes.
El evento, que se ha venido realizando desde 2017, congregó a más de 500 especialistas que debatieron sobre los desafíos actuales del sector en un contexto dominado por la inteligencia artificial, las modificaciones en la normativa europea y la evolución de las responsabilidades corporativas.
Durante la conferencia de apertura, Manuel Villoria, presidente de la Autoridad Independiente de Protección al Informante, enfatizó la necesidad de contar con instituciones tanto represivas como preventivas, sólidas, autónomas y transparentes en la lucha contra la corrupción.
Villoria abogó por una mayor protección para el ‘compliance officer’ como responsable del sistema interno de información, para asegurar la efectividad de los sistemas de denuncia.
La jornada se dividió en tres principales bloques temáticos: la adopción de la inteligencia artificial, la simplificación de la normativa europea y el futuro del ‘compliance officer’ en un entorno en constante cambio.
Los expertos advirtieron que la tecnología avanza más rápido que su regulación, que el 85% de las organizaciones aún no ha establecido un plan para la IA y que la transición de una hiperregulación a una simplificación normativa presenta nuevos riesgos y requiere un esfuerzo adicional de adaptación por parte de los encargados de cumplimiento.
En un debate que contó con la participación de magistrados del Tribunal Supremo y el exministro de Justicia Francisco Caamaño, se discutió sobre la responsabilidad penal corporativa y la posible repetición de acciones contra quienes actúen con negligencia, conforme al artículo 31 bis del Código Penal.
Los expertos reafirmaron la protección del ‘compliance officer’, similar a la de otros profesionales, pidieron reducir el ‘halo de hiperresponsabilidad’ y lo describieron como ‘guardián del espíritu de la organización’, esencial para la sostenibilidad y la cultura ética corporativa.
Finalmente, José Zamarriego, presidente de Ascom, destacó los logros recientes de la asociación, como la aprobación de su código ético, nuevas certificaciones y acreditaciones profesionales, y el aumento en el número de profesionales certificados Cescom. Zamarriego resaltó la importancia estratégica del ‘compliance officer’ en la empresa moderna, subrayando su papel clave en el cumplimiento normativo, la transparencia y la responsabilidad social ante un mayor escrutinio público.
