El líder de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, ha calificado la reforma del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) implementada por el Gobierno como «necesaria» para los trabajadores por cuenta propia, aunque ha expresado su decepción porque «el sistema no ha funcionado como todos preveíamos», argumentando que beneficia más a las grandes corporaciones y perjudica a las pequeñas y medianas empresas y a los autónomos.
En una entrevista con Europa Press, Amor ha indicado que un 75% de los autónomos han abonado una cantidad menor o igual a la del pasado, pero un 25% ha enfrentado un incremento de 450 euros en su pago anual comparado con 2022.
Ha destacado la «falta de agilidad de la regulación» y ha criticado la prolongación en la implementación de la reforma, que «debería de haber terminado en el año 2023, pero que ha terminado en junio del año 2025». Además, ha denunciado errores de interpretación que «han perjudicado a los autónomos», especialmente a aquellos que cotizan en la base máxima en el régimen general, a los que «se les ha querido cobrar en la base máxima también en el régimen de autónomos», a pesar de que «solo existe una base máxima para todo el sistema, independientemente de los diferentes regímenes de cotización que hay».
Finalmente, el también vicepresidente de la CEOE ha comentado que «no se puede iniciar un proceso de negociación sobre nuevas cotas mientras persistan problemas que han perjudicado a los autónomos en este año» y ha rematado afirmando que «la Seguridad Social tiene que devolver y restituir todo lo que se ha hecho mal en la regularización del año 2023».














