El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, mediante Adif Alta Velocidad, ha avanzado más allá de la mitad de las obras que unirán las líneas de alta velocidad Madrid-Barcelona y Madrid-Levante dentro de la capital española, una iniciativa que mejorará el enlace directo entre regiones del noreste y norte-noroeste de la península.
Este proyecto, con una inversión superior a los 110 millones de euros, facilitará la operación de los trenes de la línea Madrid-Barcelona (que actualmente comienzan y terminan en Puerta de Atocha) para que lleguen a la estación Madrid Chamartín-Clara Campoamor. Esto se logrará mediante un túnel en ancho estándar que conecta ambas estaciones madrileñas, utilizando parte de la línea Madrid-Levante.
En consecuencia, se habilitarán servicios que permitirán a los pasajeros del corredor noreste (Aragón y Cataluña) continuar su viaje hacia el norte-noroeste peninsular sin necesidad de transbordos y viceversa.
Además, esta obra permitirá que los trenes que vienen de Barcelona tengan acceso al aeropuerto Adolfo Suarez Madrid-Barajas por medio de la conexión en ancho estándar que actualmente se construye desde Chamartín.
Asimismo, esta construcción del baipás posibilitará que los trenes del corredor noreste accedan a la futura estación pasante de Atocha, ubicada bajo la actual estación de Puerta de Atocha.
El enlace entre estas dos líneas de alta velocidad se da únicamente en el área delimitada por las autopistas M-45 y M-50 y el área de Perales del Río (Getafe), un punto de alta complejidad técnica debido a la abundancia de infraestructuras y áreas naturales, tal como lo menciona el Ministerio en una declaración.











