El Banco Mundial ha destinado un total de 400 millones de dólares (339 millones de euros) a Guatemala con el propósito de mejorar la infraestructura en áreas rurales, de acuerdo con un comunicado reciente.
El plan especifica la rehabilitación y mejora de 640 kilómetros de caminos y carreteras en áreas como el Altiplano guatemalteco, las Verapaces y el Corredor Seco. Se busca que aproximadamente 5,1 millones de habitantes se beneficien de un acceso más fácil a mercados y servicios esenciales de salud y educación.
La financiación se enfoca en la mejora de vías rurales que se encuentran en áreas propensas a riesgos climáticos y en incrementar la capacidad de respuesta frente a emergencias provocadas por el clima.
Aunque Guatemala ha progresado en la expansión de su red de transporte en años recientes, solamente el 40% de las carreteras están asfaltadas. Por lo tanto, el programa también incluye el desarrollo de estrategias de mantenimiento a largo plazo para asegurar la durabilidad de las vías rehabilitadas y construidas.
«Este proyecto fortalecerá la conexión entre regiones, facilitará el acceso a servicios y oportunidades, y contribuirá a dinamizar la economía local, particularmente en los territorios con mayores rezagos», indicó el ministro de Finanzas Públicas de Guatemala, Jonathan Menkos.