La corporación alemana Bayer registró una disminución del 44% en su beneficio neto durante la primera mitad de 2025 en comparación con el mismo período del año anterior, logrando un beneficio de 1.100 millones de euros, tras enfrentar unas pérdidas de 199 millones en el segundo trimestre. Estas cifras son resultado principalmente de los costes por reestructuración y litigios que ha tenido que asumir la empresa con sede en Leverkusen.
Los gastos extraordinarios durante los seis primeros meses del año ascendieron a 1.568 millones de euros, lo que supone un aumento del 125% respecto al año anterior, incluyendo un impacto negativo de 981 millones entre abril y junio.
El Ebitda de Bayer, antes de considerar elementos atípicos, se situó en 6.190 millones de euros en el semestre, un 5,1% menos que en el mismo periodo de 2024, con un margen del 25,3% comparado con el 26,2% del año previo.
Las ventas totales de Bayer hasta junio de 2025 se situaron en 24.477 millones de euros, reflejando una caída del 1,7% en comparación con el año anterior, afectadas por la variación en el tipo de cambio que impactó negativamente con 605 millones, incluyendo un efecto adverso de 550 millones en el segundo trimestre.
La división de CropScience de Bayer vio una reducción del 4% en sus ingresos semestrales, alcanzando los 12.368 millones de euros, mientras que el sector farmacéutico creció un 0,6%, sumando 9.018 millones de euros, y la división de productos de consumo aumentó un 1,2%, hasta los 2.926 millones.
En el segundo trimestre, Bayer enfrentó pérdidas de 199 millones de euros, comparado con las pérdidas de 34 millones del año anterior, mientras que sus ventas totalizaron 10.739 millones, un 3,6% menos que en el mismo trimestre del año pasado, aunque ajustando por el efecto cambiario, se registró un aumento del 0,9%.
‘Comenzamos un importante segundo semestre de 2025, que estará marcado por un mayor progreso en todas las prioridades estratégicas, la continuidad de los lanzamientos y la necesidad de afrontar dificultades geopolíticas y cambiarias’, indicó Bill Anderson, el consejero delegado de Bayer, asegurando además que la empresa tiene como objetivo ‘contener significativamente’ el riesgo de litigios para finales de 2026.
Además, Anderson resaltó que debido al buen desempeño del sector farmacéutico, Bayer ha incrementado sus previsiones de ventas y beneficios ajustados por el tipo de cambio para todo el 2025, teniendo en cuenta también los efectos financieros de los recientes eventos geopolíticos.