Bayer, el conglomerado alemán de química y farmacia, ha comunicado un beneficio neto de 137 millones de euros durante los primeros nueve meses de 2025, contrastando con las pérdidas de 2.217 millones del año anterior en el mismo periodo. La empresa ha reafirmado sus proyecciones anuales, pese a incrementar las estimaciones de provisiones para litigios y otros gastos no recurrentes.
En el tercer trimestre, sin embargo, la firma experimentó pérdidas de 963 millones de euros, lo que representa una disminución del 77% en comparación con el mismo trimestre del año previo. Hasta septiembre, los efectos adversos incluyeron provisiones por litigios que sumaron 3.456 millones de euros, con 1.049 millones correspondientes solo a este último trimestre.
El Ebitda ajustado de Bayer alcanzó los 7.701 millones de euros, mostrando una leve caída del 0,9% respecto al año anterior, aunque en el tercer trimestre se observó un aumento del 20,8%, llegando a 1.511 millones. La facturación total de la compañía hasta septiembre fue de 34.137 millones de euros, marcando un descenso del 2,1%, y una caída del 3% en el trimestre julio-septiembre, con ingresos de 9.660 millones.
Por sectores, la división de CropScience vio reducir sus ingresos en un 3,8% hasta los 16.226 millones de euros; la farmacéutica bajó un 0,9%, situándose en 13.353 millones; mientras que la de productos de consumo subió un 0,9%, hasta 4.341 millones. Bill Anderson, CEO de Bayer, expresó confianza en alcanzar las metas revisadas para 2025, destacando un momento «crucial y muy dinámico» para la empresa, reflejado en el aumento de las provisiones por diversos factores.
Con las nuevas asignaciones para provisiones en el tercer trimestre, Bayer ahora espera que los costes extraordinarios del Ebitda para el año completo estén entre -4.000 y -3.500 millones de euros, comparado con la estimación previa de entre -3.500 y -2.500 millones.











