En la apertura de la jornada bursátil de este viernes las acciones de BBVA han experimentado un aumento del 7%, alcanzando los 16,82 euros, mientras que las de Banco Sabadell han registrado un descenso superior al 6,4%, situándose en 3,020 euros por acción, a raíz del fracaso de la oferta pública de adquisición (OPA) lanzada por la entidad liderada por Carlos Torres sobre el banco catalán, propuesta que solo ha logrado la aprobación del 25,47% de las acciones con derecho a voto.
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) informó ayer, con el mercado de valores español ya cerrado, que la OPA no ha cumplido con el umbral mínimo establecido por BBVA para la validación de la oferta.
En consecuencia, los títulos de BBVA se dispararon en el mercado estadounidense, cerrando la sesión con una subida del 6,68% (19,48 dólares por acción).
BBVA no opera directamente en Wall Street, sino a través de los ADR (American Depositary Receipt), que son certificados negociables en EE. UU. que representan acciones de empresas no estadounidenses.
La OPA estaba dirigida a la totalidad del capital de Banco Sabadell, aunque su validez dependía de adquirir al menos la mitad de las acciones con derecho a voto del banco catalán, excluyendo la autocartera.
Tras 17 meses desde el anuncio de la operación, BBVA no ha logrado que la OPA alcance el 50% de aceptación requerido para obtener el control de la compañía.
La oferta fue aceptada por 1,27 millones de acciones, representando el 25,33% del capital a que se dirigía la operación y del capital social de la entidad afectada, y el 25,47% de los derechos de voto de Banco Sabadell, excluyendo la autocartera.
De acuerdo con la notificación enviada al regulador, las aceptaciones presentadas a la OPA quedarán anuladas inmediatamente, siendo los costes del proceso de aceptación asumidos por el oferente.
Los accionistas de Sabadell que participaron en la OPA mantendrán sus acciones, sin que esto afecte a su titularidad.
BBVA retoma su senda de dividendos
Poco después de publicarse el resultado, BBVA anunció que acelerará su programa de distribución de beneficios. Específicamente, el 31 de octubre comenzará la recompra de acciones pendiente, valorada en cerca de 1.000 millones de euros.
Además, el 7 de noviembre pagará el mayor dividendo a cuenta de su historia, de 0,32 euros por acción, lo que implicará un desembolso total aproximado de 1.800 millones de euros.
Una vez obtenida la autorización del Banco Central Europeo (BCE), BBVA iniciará una significativa recompra adicional de acciones.
En la presentación de resultados de julio, la entidad había anunciado un plan estratégico hasta 2028 que contempla distribuir 36.000 millones de euros entre sus accionistas, esperando obtener beneficios netos de 48.000 millones de euros entre 2025 y 2028.
Reacciones a la OPA
El Gobierno y varios políticos han reaccionado frente al fracaso de la OPA. El Ministerio de Economía, Comercio y Empresa ha expresado su “total respeto” a la decisión de los accionistas de Banco Sabadell y ha alabado la “impecable” actuación de todos los supervisores y autoridades involucradas: Banco de España, Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y CNMV.
Por otro lado, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha defendido que la oferta era “una mala operación” y ha celebrado su fracaso: “Que no siga adelante es una buena noticia para el país”.