Este viernes, Boeing ha comenzado la expansión de su instalación en Carolina del Sur (EE.UU.), donde se ensambla el 787 Dreamliner. Este proyecto, que supone una inversión de más de 1.000 millones de euros, tiene como objetivo incrementar la producción hasta alcanzar los 10 aviones mensuales para 2026, de acuerdo con un comunicado oficial de la empresa.
La ampliación incluye la construcción de un nuevo edificio para el montaje final, que será similar en dimensiones al existente, y contendrá áreas destinadas a la producción de aviones, apoyo productivo y oficinas. Adicionalmente, se erigirán nuevas instalaciones para la preparación de piezas y para la pintura de aletas verticales, así como puestos de vuelo y otras infraestructuras en el campus del aeropuerto. También se prevé la expansión del centro de responsabilidad de interiores, donde se elaboran numerosos componentes del interior del 787.
El proyecto no solo ampliará la infraestructura, sino que también creará empleos, con más de 2.500 nuevas posiciones a cargo de la empresa conjunta formada por HITT Contracting y BE&K Building Group.
Boeing ha anunciado que un total de 90 clientes internacionales han realizado más de 2.250 pedidos del 787 Dreamliner, lo que lo convierte en el avión de pasajeros de fuselaje ancho más vendido de la historia. Con más de 1.200 aviones entregados hasta la fecha, el 787 tiene una cartera de pedidos cercana a los 1.000 aviones, incluyendo más de 300 nuevos pedidos este año. Según las proyecciones de Boeing, se estima que la demanda de aviones de fuselaje ancho superará los 7.800 unidades en las próximas dos décadas.
“Seguimos observando una fuerte demanda de la familia 787 Dreamliner y su eficiencia y versatilidad líderes en el mercado. Realizamos esta importante inversión hoy para garantizar que Boeing esté preparada para satisfacer las necesidades de nuestros clientes en los años y décadas venideros”, destacó Stephanie Pope, presidenta y directora ejecutiva de Boeing Commercial Airplanes.











