En el segundo trimestre de 2025, la diferencia entre el crecimiento de los precios de las viviendas y el desarrollo económico de España alcanzó el 12,8%, cifra que contrasta con máximos anteriores como el del año 2007, que fue del 44,2%, o el 16,9% de 2020 durante el confinamiento.
De acuerdo con un análisis realizado por UVE Valoraciones, este desajuste es menor al observado en la década de los noventa, cuando se registró un 36,1%. Al analizar por comunidades autónomas, con datos hasta 2024, se observó que el desajuste nacional fue del 8,87%, siendo Cataluña (15,28%) y Madrid (14,74%) las más afectadas, seguidas por Baleares (11,97%), Cantabria (10,27%) y Andalucía (9,14%).
En Cataluña, el mercado inmobiliario de Barcelona y las áreas de Girona y Tarragona son clave en esta discrepancia, mientras que en Andalucía, ciudades como Málaga, Cádiz, Granada y Sevilla muestran desfases superiores al promedio.
El estudio también apunta a que Extremadura y Castilla la Mancha son las comunidades donde los precios de la vivienda han crecido menos que sus economías. Asimismo, se destaca que regiones como Cataluña, Madrid y Baleares, además de zonas como Málaga y en menor medida Cantabria, Cádiz, Granada y Sevilla, necesitan vigilancia especial. Las provincias de Alicante y Valencia también requieren atención por el aumento reciente en sus precios.
LAS DIFICULTADES PARA INICIAR VIVIENDA ESTÁN DETRÁS DEL ‘GAP’
El análisis de los desajustes con la iniciativa de nuevas viviendas desde 2019 y los déficits residenciales estimados por UVE Valoraciones revela patrones inconsistentes. En áreas como Cataluña y Cantabria, problemas para comenzar nuevas construcciones, como la falta de suelo y obstáculos burocráticos, pueden haber ampliado esta brecha.
Por otro lado, en Baleares y Madrid, donde los déficits de vivienda son más altos, también se perciben tensiones en los precios. Sin embargo, en la Comunidad Valenciana y Murcia, a pesar de un déficit considerable y pocas nuevas viviendas, el desfase de precios es menor, lo que es una ‘anomalía relevante que requiere seguimiento’, según UVE Valoraciones.
‘Los desfases actuales no justifican hablar de burbuja, pero sí muestran tensiones en áreas concretas donde la oferta es insuficiente o la demanda crece con más rapidez que la economía. Para anticipar posibles riesgos es imprescindible reforzar el análisis y mantener una vigilancia continua en las zonas más expuestas’, ha concluido el presidente de UVE Valoraciones, Germán Pérez.











