La plataforma de intercambio de criptomonedas Bybit ha comunicado el inicio de sus operaciones en el Reino Unido, con el objetivo de atender el “creciente interés” por las plataformas de activos digitales en este mercado, tal y como ha señalado la compañía en una nota oficial.
El 'exchange' ha detallado que los usuarios residentes en el país podrán utilizar servicios de 'trading spot' en más de 100 pares de criptomonedas, así como realizar operaciones 'peer-to-peer' (P2P), todo ello respaldado por “una elevada liquidez global y sólidos estándares operativos y de gestión de riesgos”.
La firma ha remarcado que su implantación en territorio británico se ha llevado a cabo dentro de un marco específicamente diseñado para ajustarse a las exigencias de la Autoridad de Conducta Financiera (FCA, por sus siglas en inglés).
De acuerdo con estimaciones de la propia FCA citadas por la empresa, alrededor de un 8% de los adultos del Reino Unido ya dispone de activos digitales, una evolución que, según Bybit, pone de manifiesto una mayor demanda de plataformas seguras y de alta calidad.
“Nuestro objetivo es ofrecer a los usuarios del Reino Unido un acceso fiable a las oportunidades globales en activos digitales”, ha indicado el director sénior de política en Bybit, Mykolas Majauskas, quien ha resaltado que el país “alberga uno de los ecosistemas financieros más sofisticados del mundo y cuenta con una dirección regulatoria clara”.
Por otro lado, el cofundador y consejero delegado de Bybit, Ben Zhou, ha explicado que en los últimos doce meses han desarrollado productos pensando específicamente en las necesidades de los usuarios británicos, y ha subrayado que la llegada al país supone “el inicio de una nueva etapa” para la compañía dentro del mercado del Reino Unido.
Bybit ha incidido en que sus actividades en el país se rigen por estrictos estándares de prevención del blanqueo de capitales (AML) y de conocimiento del cliente (KYC), y ha añadido que todos sus servicios respetan las normas locales en materia de promoción financiera.
La plataforma ya había desembarcado en el mercado español hace tan solo dos meses, aprovechando su pasaporte europeo concedido en Austria.