Este agosto, numerosos campings en España están a punto de alcanzar su máxima capacidad, convirtiéndose en una opción vacacional predilecta para muchos ciudadanos. Este fenómeno se debe en gran medida a un incremento promedio en sus precios de solo un 7%, lo cual es considerablemente menor en comparación con los aumentos en los costos de hoteles y vuelos.
De acuerdo con información proporcionada por la Federación Española de Campings (FEEC), aproximadamente 4,2 millones de españoles, que representan el 16,8% de los 38 millones estimados que viajarán de junio a septiembre, elegirán los campings como su principal destino de vacaciones, evidenciando así la creciente aceptación de esta modalidad.
Se anticipa que la ocupación promedio será superior al 90% a lo largo del país en agosto, con muchos campings reportando completas reservas, especialmente hasta el 24 de agosto. Actualmente, es casi imposible encontrar disponibilidad en bungalows y las plazas para autocaravanas, campers y caravanas están disminuyendo rápidamente.
A pesar de que el perfil típico del campista sugiere una estancia promedio de siete días, se ha observado una reducción en el gasto destinado a la restauración y actividades recreativas comparado con años previos.
La FEEC proyecta que este verano se alcanzará un total de 6,5 millones de campistas, tanto nacionales como internacionales, superando las cifras récord del año anterior, que contabilizaron 6,4 millones de turistas y más de 31 millones de noches pasadas en campings en el país. Estos datos no solo demuestran la recuperación del sector postpandemia, sino también su fortalecimiento como una opción turística sostenible, económica y en armonía con el entorno natural.