CCOO ha manifestado su inquietud respecto al efecto que podría tener el nuevo plan estratégico del Banco Sabadell, anunciado el 24 de julio, en sus trabajadores, y menciona que se presenta un ‘escenario exigente’ para estos.
Desde su página web, el sindicato admite que esta estrategia, que se desarrollará hasta el año 2027, representa ‘un paso más en la defensa legítima’ del banco contra la oferta pública de adquisición hostil de BBVA.
A pesar de ello, el sindicato argumenta que los números revelados (6.300 millones de euros destinados a los accionistas y un beneficio esperado de más de 1.600 millones en 2027 sin TSB) conllevan una ‘presión estructural’ sobre la rentabilidad que podría resultar en ‘exigencias más intensas’ en la productividad del personal.
La organización también advierte que la desinversión en TSB (pendiente de aprobación en la junta de accionistas de Sabadell del 6 de agosto) significaría perder una ‘fuente relevante de ingresos’ para el grupo, lo que obligaría a centrar casi toda la actividad en España ‘sin incorporar, parece ser, nuevas fuentes de diversificación’.
‘Esto puede traducirse en la necesidad de cubrir ese vacío con mayor exigencia comercial sobre la plantilla actual’, indica el sindicato.
CCOO también destaca que el banco ha proyectado un crecimiento en márgenes y volúmenes, ‘pero con los mismos recursos’ humanos, económicos y tecnológicos, lo que ‘deteriorará el clima laboral e incrementará la carga comercial y los niveles de estrés’.
Aunque el sindicato ‘no se opone’ al reparto de dividendos propuesto, solicita ‘mejoras salariales’, un futuro laboral ‘sólido’ y más inversiones en tecnología y personal. ‘Somos plantilla ‘premium’, pero no tenemos cuatro manos’, subraya.
‘Todo el sobreesfuerzo que se nos exigirá para mantener márgenes sin TSB, en un plan estratégico que no contempla posibles crisis o imprevistos, no nos genera tranquilidad. Desde CCOO necesitamos creer en la viabilidad de un proyecto que dé estabilidad a la plantilla’, exige al banco.
Asimismo, aunque reconoce que la dirección ha valorado el esfuerzo de los empleados frente a la OPA de BBVA, señala que ‘no basta con una frase amable’ y demanda ‘recompensas’.
Además, señala que se ha mencionado un nuevo sistema de incentivos ligado a la ‘generación de valor’, un concepto que CCOO considera ‘vago’ y que ‘más bien suena a excusa para recortar el variable de siempre’. ‘Tocará estar muy atento a su implementación’, advierte.
‘Nos preguntamos cómo esperan generar más margen y volumen. ¿A base de más presión comercial, más carga de trabajo o más horas? Parece un planteamiento poco viable si todo el excedente se destina únicamente a retribuir a los accionistas, sin reinvertir en reforzar los equipos humanos y tecnológicos ni en reservar recursos que doten al proyecto de solidez financiera y futuro’, lamenta el sindicato.
CCOO concluye mencionando que con el nuevo plan se abre un ‘escenario exigente’ para la plantilla que ‘requiere vigilancia y una defensa activa de las condiciones laborales’, comprometiéndose la organización a llevar a cabo esta tarea.