La vendimia en la Denominación de Origen Calificada (DOCa) Rioja ha comenzado revelando que la cosecha de uva es considerablemente inferior a otros años. Abel Torres, gerente de la Cooperativa de Aldeanueva de Ebro, ha confirmado una reducción ‘histórica’ y ‘mayor’ de lo que se había previsto.
La cooperativa, conocida por ser una de las primeras en iniciar la vendimia, comenzó su jornada a las seis de la mañana de este lunes, inicialmente recolectando solo tempranillo blanco. Durante la semana, el plan es continuar con verdejo, viura y, posiblemente esta semana, uva tinta.
‘Vamos a acelerar un poco, porque vemos que las graduaciones alcohólicas son 0,5 ó 0,6, más de lo que esperábamos, normal por el calor’, señaló Torres.
Impacto del clima y expectativas de calidad
Después del primer día de vendimia, se percibe que ‘hay muy poca uva, la merma va a ser histórica’, estimó Torres, quien espera, aunque es temprano para confirmarlo, ‘una cosecha de extrema calidad’.
Según el gerente, la uva ‘está muy sana’ y la calidad que se está recibiendo es ‘espectacular’, beneficiada por la ausencia de lluvias en los últimos días que ‘se nota muchísimo’.
En esta jornada se han recogido 220.000 kilos de tempranillo blanco, beneficiados por el primer día de descenso térmico después de una intensa ola de calor, que elevó las temperaturas hasta los 42 grados en La Rioja.
‘Muchísimo mejor, porque hay que enfriar mucho menos las uvas cuando llegan a bodega y va a madurar de forma más lenta, que es lo que queremos’, explicó Torres. La bajada de temperaturas permite además extender los horarios de vendimia y brinda un respiro a las plantas, que ‘no se pueden proteger’, a diferencia de los humanos que pueden usar una visera.