El fondo de inversión D.E. Shaw ha establecido una posición corta que representa el 0,5% del total del capital de Banco Santander, según las últimas comunicaciones de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Es la primera ocasión en que el fondo apuesta contra las acciones de Banco Santander. Desde 2022, el banco, bajo la dirección de Ana Botín, no había registrado posiciones bajistas significativas (de al menos 0,5%).
El 0,5% equivale aproximadamente a 74,4 millones de acciones, que, al precio de cierre del miércoles, alcanzarían un valor de mercado de unos 668,4 millones de euros.
La valoración es estimada, pues se desconoce el precio medio al que D.E. Shaw adquirió estas posiciones, ni si se efectuaron mediante compra directa de acciones o a través de instrumentos financieros.
Los futuros beneficios de esta operación dependerán también del precio medio al que se recompran las acciones vendidas, los costes de apalancamiento y las compensaciones a los dueños de las acciones prestadas.
Entre otros bancos del Ibex 35, BBVA, Sabadell y Unicaja no presentan posiciones cortas activas desde 2024. En cuanto a CaixaBank, no se registran desde enero de 2025.
Este mismo martes, el fondo Millenium redujo su posición corta en Bankinter del 0,51% al 0,49%, mientras que el fondo de pensiones de Canadá mantiene una posición corta del 1,2% desde julio.
















