Este fin de semana, Madrid será el escenario de un evento sin precedentes que va más allá del ámbito deportivo: el primer encuentro de la National Football League (NFL) en territorio español. El remodelado Estadio Santiago Bernabéu, ahora un moderno coliseo multifuncional, albergará el emocionante partido entre los Miami Dolphins y los Washington Commanders este domingo 16 de noviembre.
La celebración de este partido en Madrid marca un punto de inflexión para el turismo deportivo en España, resaltando su importancia como destino estratégico a nivel internacional. La NFL, buscando expandir su presencia global, ha seleccionado Madrid como la cuarta ciudad europea para acoger un partido de la temporada regular, después de Londres, Frankfurt y Múnich. Además, partidos fuera de Europa se han celebrado en países como México y Brasil.
El impacto económico de este evento es significativo. Se anticipa que miles de aficionados, principalmente de Estados Unidos, invadirán la ciudad, con entradas que oscilan entre los 80 y los 5.000 euros. La NFL estima que en España podría alcanzar hasta 11 millones de seguidores directos e indirectos, fortaleciendo así su posición en el mercado global.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el turismo deportivo generó más de 8.300 millones de euros en 2024. Eventos anteriores como la Copa Davis y el Mutua Madrid Open ya han demostrado que Madrid es un epicentro de eventos deportivos que generan un impacto económico y de imagen significativos.
Además, la ‘Experiencia NFL’, patrocinada por la Comunidad de Madrid, incluirá actividades gratuitas en diferentes puntos de la ciudad, como fan zones y eventos en pubs, que prometen transformar cada rincón de Madrid en un festival de consumo y promoción global.
Este partido no solo es un espectáculo deportivo, sino también una vitrina para el turismo de Miami y un preludio a eventos futuros, como el Mundial de Fútbol de la FIFA en 2026, donde Miami será una de las sedes principales.
El impacto de la NFL en Madrid se extiende también al aumento de las tarifas hoteleras y a un significativo incremento en el consumo de ocio y restauración, beneficiando especialmente a zonas como Salamanca y Chamberí. Con esta serie de eventos, Madrid no solo consolida su posición como un destino turístico de primer nivel, sino que también se prepara para liderar el escenario deportivo internacional en los próximos años.
