En agosto, el índice de precios de producción (IPP) en Estados Unidos experimentó un leve descenso del 0,1%, poniendo fin a tres meses consecutivos de aumentos, como indican los datos proporcionados por la Oficina de Estadísticas Laborales del Departamento de Trabajo. Este cambio de tendencia se produce después de que en julio se registrara un aumento del 0,7%.
La reducción se atribuye principalmente a la caída en la demanda de servicios, que retrocedió un 0,2%, contrastando con el crecimiento del mes anterior. Por otro lado, el segmento de bienes mostró un modesto ascenso del 0,1%, medio punto porcentual menos que en julio.
El índice subyacente, que descarta los elementos más volátiles como la energía, los alimentos y el comercio, creció un 0,3% en julio, lo que supone una disminución de tres décimas respecto al mes precedente.
Comparando los datos anuales, los precios generales aumentaron un 2,6% respecto al mismo mes del año 2024, y los precios subyacentes se incrementaron un 2,8%.











