En junio, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) de México registró una tasa de inflación anual de 4,32%, una cifra inferior al 4,98% observado en el mismo mes del año pasado, aunque el descenso fue más lento de lo anticipado.
En ese mes, la inflación mensual fue del 0,28% y el índice de precios subyacente, que excluye bienes y servicios con precios más volátiles, aumentó un 0,39%, de acuerdo con la información proporcionada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Este resultado de inflación estuvo ligeramente por debajo de las expectativas del mercado, que proyectaban una caída hasta el 4,32%.
En cuanto a los productos, los de tipo pecuario experimentaron un incremento del 11,72% a nivel interanual. Siguiendo a una considerable distancia, los mayores aumentos se observaron en educación (5,82%), otros servicios (5,53%) y productos agropecuarios (5,04%). Únicamente en el segmento de frutas y verduras se registró una reducción de precios, con una caída del -4,47%.
El Banco de México, la entidad central del país, optó por una reducción de 50 puntos básicos en las tasas de interés hace dos semanas, estableciéndolas en el 8%, y no descartó la posibilidad de nuevos recortes en los próximos meses.