Díaz advierte que eliminar la reducción de jornada laboral tendrá consecuencias: La ciudadanía no es idiota

Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, ha declarado que eliminar la propuesta de reducción de la jornada laboral a 37,5 horas no será algo que pase sin coste alguno, pues la ciudadanía ‘no es idiota’ y desea que esta medida se aplique.

‘Es la medida que yo creo que esperan los españoles y las españolas. Le afecta a 12 millones y medio de personas’, mencionó Díaz durante una entrevista en ‘Espejo Público’, según informa Europa Press.

Según Díaz, esta ley no solo beneficiará la productividad empresarial sino también la calidad de vida de los trabajadores. Al responder sobre comentarios recientes de Josep Sánchez Llibre, presidente de Foment del Treball, quien elogió la oposición de PP, Vox y Junts a esta medida, la ministra recordó que la patronal apoyó anteriormente la propuesta en el dictamen del Consejo Económico y Social (CES).

‘Podía tumbar el informe del CES, que es un informe perceptivo y muy importan, y no lo hizo’, enfatizó la ministra, agregando que ‘la patronal sabe perfectamente que esta es una medida positiva en nuestro país’.

‘En este medio de comunicación, el otro día, me decían que acabamos de firmar un convenio colectivo 35 horas a la semana. Quiero decir que esto ya es la España moderna y mejora la productividad. Lo que pasa es que hay otras realidades en esa norma que tienen que ver, bueno, con también el escenario político’, explicó Díaz.

‘ESTAMOS TRABAJANDO CON TODAS LAS FORMACIONES POLÍTICAS’

Díaz reafirmó el compromiso de trabajar con todas las formaciones políticas para implementar la medida tras el verano, luego de que el debate sobre el proyecto de ley se pospusiera para el próximo periodo de sesiones en septiembre en el Congreso de los Diputados.

Es su ‘obligación’ llevar adelante esta norma aunque se rechace democráticamente. ‘Ya lo he hecho con la reforma laboral. Acuérdese, yo llevé esa norma sabiendo que no salía, pero es mi obligación. ¿Que luego, democráticamente, quieren tumbarla? Pues bueno, la ciudadanía no es idiota’, concluyó.