Dulca, un líder en la pastelería industrial española, ha finalizado la primera etapa de su ambicioso plan de expansión y modernización con la instalación de una nueva planta en Peñaranda de Bracamonte, Salamanca, con una inversión aproximada de 30 millones de euros, según un comunicado de la empresa.
Este proyecto estratégico busca no solo duplicar la capacidad productiva de Dulca, sino también incrementar la eficiencia y reforzar su presencia en el mercado.
Las obras, que comenzaron en julio de 2024, ocupan un terreno de 65.000 metros cuadrados. En este espacio, además, se ha construido un nuevo almacén para productos terminados con una extensión de 6.500 metros cuadrados, lo que representa una cuadruplicación de su capacidad logística.
La planta nueva dispondrá de dos líneas de producción de alta eficiencia. La primera, orientada a masas batidas, iniciará operaciones este otoño, mientras que la segunda, destinada a productos fermentados, comenzará a principios de 2026.
Se han introducido también importantes avances en las áreas de envasado y paletización, que ahora operan de manera totalmente automatizada, mejorando así la eficiencia operativa y la capacidad de adaptación a las fluctuaciones de demanda.
“Esta ampliación nos posiciona para afrontar los retos del futuro con mayor capacidad, sin renunciar a lo que nos define: producto de calidad, innovación constante y compromiso con las personas que forman parte de Dulca”, ha declarado Noelia Serna, directora corporativa de Dulca.