Duro Felguera ha dejado atrás su fase de preconcurso tras presentar su plan de reestructuración ante el Juzgado de lo Mercantil número 3 de Gijón, en Asturias, buscando la aprobación judicial. Este movimiento viene respaldado por un “muy amplio” apoyo de los acreedores, tal como se ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
“Hoy damos un paso decisivo al presentar el plan de reestructuración al juzgado para su homologación, con un respaldo muy amplio de los acreedores”, han confirmado en fuentes de la compañía a Europa Press.
Las entidades implicadas han entregado al tribunal asturiano la petición formal de validación judicial del mencionado plan, oficializado en escritura pública el 21 de octubre de 2025 y respaldado por los acreedores según el certificado de mayorías del 27 de octubre de 2025 emitido por el experto en reestructuración, Lexaudit Concursal.
De acuerdo con el artículo 629.2º del Texto Refundido de la Ley Concursal, la ‘Clase 1’ de cada entidad ha obtenido el voto favorable de más del setenta y cinco por ciento de los créditos implicados.
Con la solicitud presentada, Duro Felguera marca el fin del periodo de negociación con los acreedores y comienza el procedimiento para la aprobación judicial de su plan de reestructuración. Ahora, la empresa enfrenta la fase de revisión judicial del plan, respetando los tiempos del tribunal y con una visión optimista sobre la ejecución ordenada del mismo.
El 14 de noviembre, Duro Felguera convoca a una junta general extraordinaria de accionistas, que tendrá lugar en su sede en el Parque Científico y Tecnológico de Gijón, para decidir sobre la aprobación del plan de reestructuración.
En este contexto, el grupo mexicano Prodi, junto con Mota-Engil México, desempeñarán un papel crucial en el futuro de Duro Felguera, con Prodi asumiendo el control y garantizando la viabilidad de la empresa mediante una nueva financiación capitalizable y Mota-Engil México abandonando el accionariado tras una reorganización del capital.















