El Grupo EIDF, dedicado a las soluciones de energía fotovoltaica, ha experimentado unas pérdidas netas de 12 millones de euros durante el primer semestre de 2025, junto con un resultado bruto de explotación (Ebitda) negativo de 3,4 millones. Este periodo ha estado definido por una fase de reconstrucción y mayor transparencia que comenzó a mediados de 2024, logrando unas ventas de 18,6 millones de euros.
Es la primera vez desde 2022 que la empresa recibe una opinión favorable del auditor, señal de una revisión exhaustiva y la implementación de políticas de buena gobernanza a partir del año anterior. Los ajustes contables han sido necesarios debido a revisiones técnicas y la limpieza en el ‘pipeline’ de proyectos antiguos, lo que ha permitido una representación más precisa del estado financiero actual, tal como señala la empresa en una nota de prensa.
Joan Gelonch, CEO del grupo, ha destacado la relevancia de esta fase de claridad y disciplina “sin precedentes” como fundamento para el desarrollo futuro de la compañía. Según afirma la empresa, esta limpieza mejorará la calidad de sus futuros activos y fortalecerá la imagen de EIDF como un operador responsable en el ámbito energético.
En este semestre, EIDF ha puesto en funcionamiento sus tres primeros parques solares, sumando una capacidad de 4,81 megavatios (MW), y tiene planes de añadir otros 20,3 MW en los meses venideros. En el ámbito del autoconsumo, el grupo ha instalado 16 MW y tiene en cartera 35 MW para proyectos futuros o inminentes. Asimismo, ha expandido su catálogo de servicios incluyendo soluciones completas en eficiencia energética y movilidad sostenible.