El 19% de las importaciones registradas en 2022 se orientó al consumo de los hogares, mientras que un 8,5% se utilizó para la adquisición de activos fijos dentro de la formación bruta de capital, de acuerdo con un estudio difundido por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Este viernes, el INE ha dado a conocer las tablas “Input-Output”, que ofrecen una radiografía detallada del proceso productivo de la economía española y de la interrelación entre los distintos sectores. Estas tablas permiten además analizar hasta qué punto el tejido productivo nacional depende de suministros procedentes del exterior.
El examen del conjunto de la oferta por tipos de productos, diferenciando entre producción interna e importaciones, hace posible extraer conclusiones sobre la configuración y características de la estructura productiva de España.
Así, se puede determinar en qué grado la fabricación de cada categoría de bienes está condicionada por el mercado internacional a través de las importaciones de consumos intermedios, y, en consecuencia, en qué medida puede verse impactada por cambios en los aranceles.
En 2022, los bienes con mayor dependencia del exterior fueron los productos manufacturados, especialmente por el peso del coque y los productos de refino del petróleo, ya que el 87,6% de sus consumos intermedios procedieron de la importación. También mostraron una elevada dependencia los productos metalúrgicos (49,5%), los químicos (45,3%) y la industria del automóvil (37%).
Asimismo, resaltan por su exposición al exterior la energía eléctrica y el gas, dado que el 39,1% de sus consumos intermedios fueron importados, así como los servicios de atención sanitaria, donde el 26,8% de dichos consumos tuvo origen en la importación.
El estudio del INE constata que el 19% de las importaciones totales en 2022 se dirigió al consumo de los hogares y un 8,5% se destinó a la compra de activos fijos incluidos en la formación bruta de capital.
Por otro lado, un 61,8% de las compras al exterior se utilizó como consumos intermedios en el proceso productivo, como los mencionados anteriormente. El resto de las importaciones se canalizó hacia el consumo de las Administraciones Públicas o se reexportó.
En cuanto a los bienes que más importaciones concentraron para el consumo de los hogares, destacaron los vehículos de motor, que representaron un 15,3% del total. En el ámbito de la inversión, los activos con mayor peso en las importaciones fueron la maquinaria y el equipo pesado, con un 28,5% del total.