El Ibex 35 ha vuelto a marcar un máximo sin precedentes al concluir la jornada en 17.169,8 puntos, tras avanzar un 0,22% en la sesión, pese a coincidir con la última “cuádruple hora bruja” del año, un episodio que suele incrementar la volatilidad en los mercados.
A lo largo de la semana, el selectivo ha logrado un repunte acumulado del 1,87% y suma ya cuatro jornadas consecutivas en terreno positivo, dos de ellas con el índice claramente por encima de la cota de los 17.000 enteros.
No obstante, el índice ha encontrado resistencia en los 17.200 puntos, nivel que ha llegado a superar de forma puntual en los minutos finales de la negociación de este viernes, condicionada por la volatilidad propia de la “cuádruple hora bruja”, es decir, el vencimiento simultáneo de opciones y futuros sobre índices y acciones en los mercados europeos y estadounidenses.
Desde Renta 4 subrayan además el pacto alcanzado en el seno de la Unión Europea para otorgar un préstamo de 90.000 millones de euros a Ucrania, respaldado por la emisión de deuda conjunta, y que implica, por ahora, no recurrir a los activos rusos congelados en la región para seguir proporcionando financiación al país.
En el plano macroeconómico europeo, el índice Gfk de clima de consumo en Alemania correspondiente a enero ha registrado un deterioro adicional en terreno negativo, cuando el consenso esperaba una ligera mejora. Por la tarde está previsto que se publique la primera estimación de la confianza del consumidor de la eurozona en diciembre.
En Asia, el Banco de Japón ha cumplido con las previsiones del mercado al aprobar por unanimidad una subida de 25 puntos básicos en los tipos de interés, hasta el 0,75%, su nivel más elevado en tres décadas, y ha dejado la puerta abierta a nuevos incrementos en el futuro si la inflación se consolida en torno al objetivo del 2%.
En el ámbito corporativo español, BBVA ha comunicado el lanzamiento de un programa extraordinario de recompra de acciones por un máximo de 3.960 millones de euros, el mayor de su historia, que arrancará el próximo lunes, 22 de diciembre, una vez obtenidas todas las autorizaciones regulatorias necesarias.
Por su parte, Fluidra ha alcanzado un acuerdo para hacerse con el 100% de Variopool, una empresa con sede en los Países Bajos, valorada en hasta 21 millones de euros.
Respecto al comportamiento de los mercados en los últimos días, el analista de XTB, Manuel Pinto, destaca el cambio de rumbo de las Bolsas europeas gracias a una rotación sectorial de la que el Viejo Continente estaría saliendo beneficiado. A su juicio, las crecientes dudas sobre el sector tecnológico están llevando a los inversores a diversificar hacia otros segmentos de la economía.
“Este movimiento está favoreciendo especialmente a Europa y ha permitido que el Ibex 35 viva un año histórico, con los bancos como grandes protagonistas”, agrega.
En Estados Unidos, Pinto señala que la semana ha sido una “montaña rusa”. Tras varios días con sesgo bajista y ausencia de catalizadores, el sentimiento inversor “está cambiando”. “La publicación de datos de inflación más moderados, los buenos resultados de Micron y los avances en los acuerdos para el control de TikTok han devuelto cierto optimismo al mercado”, sostiene.
En la sesión de este viernes, las mayores subidas dentro del selectivo se han visto en Acciona (+2,81%), Mapfre (+1,60%), Grifols (+1,53%), Banco Sabadell (+1,51%) e Iberdrola (+1,48%). En el lado de las caídas han destacado Telefónica (-1,72%), Naturgy (-1,51%), ArcelorMittal (-1,45%), Amadeus (-1,10%), Inditex (-1,00%) y Acerinox (-0,75%).
Las principales plazas bursátiles europeas han concluido también en verde: Milán ha avanzado un 0,66% y Londres, un 0,61%, mientras que Fráncfort ha sumado un 0,37% y París ha cerrado prácticamente sin cambios (+0,01%).
En el mercado de materias primas, el barril de crudo Brent, referencia en Europa, repuntaba un 0,67%, hasta 60,23 dólares, al tiempo que el West Texas Intermediate (WTI), referencia en Estados Unidos, ganaba un 0,82%, hasta 56,61 dólares.
En el mercado de divisas, el euro se cambiaba por 1,1720 dólares, mientras que la rentabilidad del bono español a 10 años se situaba en el 3,323%, con la prima de riesgo frente al “bund” alemán en 42 puntos básicos.