La planta de Ence en Pontevedra ha comenzado su mantenimiento anual, que se extenderá hasta el 25 de septiembre. Durante este tiempo, aproximadamente 1.500 profesionales adicionales se sumarán al equipo habitual para llevar a cabo tareas de mantenimiento y mejoras en la infraestructura.
La empresa ha informado que invertirá más de 11 millones de euros en esta intervención con el fin de “reforzar la eficiencia operativa de la biofábrica, incrementar los estándares de seguridad industrial y avanzar en el desempeño medioambiental de sus procesos”.
Esta inversión está alineada con “el compromiso de Ence de mantener las instalaciones de Pontevedra como un referente en sostenibilidad, innovación y excelencia dentro del sector”, según han indicado. De la inversión total, cinco millones de euros se emplearán en mantenimiento preventivo y correctivo, destinados a “garantizar la fiabilidad de los equipos”. El resto se dedicará a proyectos estratégicos de mejora tecnológica, optimización energética y reducción del impacto ambiental, además de la mejora de la seguridad en las instalaciones.
SEGURIDAD Y SALUD
Ence también subraya la importancia de la seguridad y salud laboral, la cual mantendrá una vigilancia reforzada durante este periodo, asegurando un estricto cumplimiento de todas las medidas de prevención.
Además, la biofábrica recalca el “impacto positivo en la economía local” que genera esta parada técnica. “Una parte significativa de las empresas auxiliares involucradas son de Galicia y otros servicios como alojamiento y manutención de los trabajadores se proveerán por empresas locales”, detalla la compañía.









