El grupo de distribución Eroski ha cerrado el tercer trimestre del ejercicio con un beneficio neto de 90,3 millones de euros, lo que supone un avance del 36% frente al mismo periodo del año anterior, acompañado de unas ventas brutas de 4.501 millones, un 3% superiores, según ha comunicado la compañía.
En una nota remitida a los medios, la empresa ha presentado las cuentas correspondientes al tercer trimestre, en el que, tal y como resalta, mantiene el dinamismo comercial y consolida “su crecimiento sostenido”.
La cooperativa ha explicado que la cifra de negocio prosigue con la tendencia alcista de los últimos años y que el volumen de actividad se sitúa en unas ventas brutas de 4.501 millones de euros.
Según detalla, las ventas brutas del negocio alimentario han actuado como principal palanca de este avance, con un incremento del 2,9% respecto al mismo tramo de 2024, hasta alcanzar los 4.270 millones de euros.
El resultado positivo del grupo asciende a 90,3 millones de euros, un 36% más que en el tercer trimestre del ejercicio precedente. Eroski recuerda que, a finales de noviembre, culminó su proceso de refinanciación y que, por tanto, a cierre de octubre todavía no se recogen en las cuentas los costes asociados a dicha operación. El ebitda se sitúa en 251 millones, un 1,8% por encima del registrado un año antes.
Eroski atribuye esta evolución a “la buena recepción” de la política promocional y de contención de precios que viene desarrollando desde finales de 2021, con la finalidad de “mitigar el traslado de los mayores costes a los precios de venta”.
El grupo subraya que, pese a que este esfuerzo en ahorro para el consumidor se ha producido en un entorno de costes de explotación “crecientes” en comparación con el año anterior, ha logrado acotar su efecto gracias a la continuidad de los programas de mejora de la eficiencia.
La CEO de Eroski ha señalado que el trimestre se ha saldado en línea con las previsiones internas, lo que refuerza la “solidez” de su modelo comercial y la eficacia de las medidas puestas en marcha para apuntalar su “posicionamiento competitivo” y su compromiso de ofrecer a las personas consumidoras una amplia capacidad de elección de surtido, con una decidida apuesta por la marca propia y los productos frescos, manteniendo una relación calidad-precio muy competitiva.
Al mismo tiempo, ha remarcado que continúan desplegando proyectos orientados a ganar eficiencia, muchos de ellos apoyados en soluciones de analítica avanzada e inteligencia artificial.
“Prueba de ello es que el ebitda en los nueve primeros meses del ejercicio ha alcanzado los 251 millones de euros, una cifra que supera la obtenida en el mismo periodo del año anterior; lo que refleja la buena evolución de nuestra actividad operativa y comercial”, ha destacado.
Hoja de ruta hasta 2026
De cara a 2026, último ejercicio del actual plan estratégico, Eroski mantiene una hoja de ruta enfocada “en un crecimiento rentable y prudente”. “Continuidad del crecimiento y disciplina financiera”, ha subrayado la compañía.
La cooperativa avanza que seguirá reforzando su modelo de proximidad y su apuesta por la marca propia, la marca de fabricante y el producto local, al tiempo que impulsa la digitalización y la omnicalidad “para mejorar la experiencia de compra y la eficiencia de toda la cadena de valor”. “Todo ello, con un firme compromiso con la sostenibilidad”, ha agregado.
Además, con una estructura financiera ya ordenada tras la refinanciación, el grupo continúa desarrollando su estrategia de expansión bajo una “estricta disciplina financiera”, destinando recursos a la modernización de su parque de tiendas y a la ampliación de la red en áreas consideradas prioritarias, en coherencia con el objetivo de apalancamiento comunicado.