En un esfuerzo conjunto, España, junto a Bélgica, Francia, Italia, Países Bajos y Portugal, ha decidido presentar una propuesta en Bruselas para solicitar a la Comisión Europea que se realice una simplificación y revisión de la Política Pesquera Común (PPC). Luis Planas, ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, ha comunicado esta decisión a los consejeros correspondientes de las comunidades autónomas durante el Consejo Consultivo de Política Pesquera para Asuntos Comunitarios, que tuvo lugar hoy mediante videoconferencia.
Planas ha resaltado la necesidad de “adaptar la PPC al contexto actual, reforzando la soberanía alimentaria, la autonomía estratégica y la viabilidad socioeconómica del sector”, enfocándose además en los desafíos que plantean el cambio climático, la competencia por el espacio marítimo y la conservación de las comunidades costeras.
El ministro ha señalado la complejidad de las negociaciones sobre los Totales Admisibles de Capturas (TAC) y las cuotas de pesca para 2026, tanto en el Atlántico como en el Mediterráneo, y ha destacado la importancia de lograr un equilibrio entre la sostenibilidad de los recursos y la rentabilidad socioeconómica del sector. En relación con el Mediterráneo, ha mencionado que, aunque la propuesta definitiva aún no se ha publicado, las negociaciones anticipan ser particularmente difíciles debido al nuevo marco a largo plazo, que impone límites de captura y criterios de sostenibilidad más rigurosos.
“España defenderá que se consideren los factores socioeconómicos junto con los de conservación”, ha afirmado Planas, refiriéndose a especies cruciales para la flota artesanal y de arrastre en el Cantábrico, Noroeste y Golfo de Cádiz, que considera las ‘reducciones inasumibles’ en un sector ya comprometido con la selectividad y la sostenibilidad.
Además, en el ámbito de la Política Agraria Común (PAC) post-2027, Planas ha insistido en la necesidad de una PAC “sólida, autónoma y con presupuesto suficiente”, preparada para enfrentar nuevos desafíos en seguridad alimentaria y sostenibilidad. Ha resaltado la fortaleza de España en el comercio agroalimentario, con exportaciones que superan los 77.000 millones de euros, y la importancia de mantener relaciones comerciales estables, especialmente con Estados Unidos y Ucrania, mientras se protegen los sectores sensibles nacionales.
