España es reconocida como el país más esperanzado de Europa y Oriente Medio en el contexto de la guerra arancelaria, de acuerdo con el análisis de Oxford Economics sobre la más reciente edición del International Business Report (IBR), un informe preparado por Grant Thornton que evalúa las expectativas y preocupaciones de las empresas del ‘middle-market’ tanto a nivel nacional como internacional.
El mencionado informe señala que el optimismo en estas regiones se ha mantenido ‘sin cambios’ durante el último trimestre, destacando a España con un índice de optimismo del 67%, en contraste con la región de Asia-Pacífico que experimenta una notable disminución en el optimismo, con una reducción de seis puntos básicos.
‘Un resultado condicionado por la amenaza de Donald Trump de imponer aranceles de hasta el 50% a países de esta región, como Camboya, Laos y Vietnam’, expone el estudio, añadiendo que en este escenario de inestabilidad global, las empresas españolas se enfocan en el mercado interno.
EMPRESARIOS ESPAÑOLES BUSCAN OPORTUNIDADES EN EL MERCADO NACIONAL
Por otro lado, por segundo trimestre consecutivo, los líderes del ‘middle-market’ nacional ven a España como el país con las mayores oportunidades de mercado, una percepción que se replica en otras partes de Europa y Asia.
A nivel mundial, la inestabilidad predomina sobre las oportunidades que presentan los mercados nacionales, reflejando el ‘International Business Report’ del segundo trimestre una nueva disminución del optimismo global de los empresarios del ‘middle-market’, que ha caído cinco puntos porcentuales desde finales de 2024. A pesar de esto, un 71% de los líderes de empresas medianas sigue siendo optimista respecto a la evolución económica a corto plazo, aunque los resultados evidencian las áreas geográficas más impactadas por la guerra arancelaria.
PREVISIONES CONDICIONADAS POR NUEVA BATERÍA DE ARANCELES
Grant Thornton ha indicado que la serie de políticas proteccionistas recientemente impulsadas por diversos estados tendrá un ‘impacto directo sobre el comercio global y puede dejar a la economía al borde de la recesión’. Además, el análisis esboza diversos escenarios sobre el impacto total de la guerra arancelaria, indicando que en el peor caso, la economía global podría aproximarse a un ‘descenso del crecimiento y no recuperaría el ritmo de crecimiento del primer trimestre hasta 2028’. Sin embargo, la perspectiva más optimista sugiere que la economía global mantendría un crecimiento cercano al 2% y limitaría al año próximo el impacto de la incertidumbre.
Las proyecciones de crecimiento económico están influenciadas por la nueva serie de aranceles, y según Oxford Economics, regiones como Norteamérica y Asia Pacífico podrían verse ‘muy afectadas’ por la evolución de la guerra comercial, mientras que otras áreas como la Eurozona, el Norte de África o el Golfo Pérsico experimentarían un impacto ‘mucho más limitado’.
‘Lo cierto es que la guerra arancelaria ya empieza a lastrar la economía de Estados Unidos’, destaca el estudio, que señala que en los primeros tres meses del año, el Producto Interior Bruto (PIB) de la potencia americana se contrajo un 0.1% respecto al último trimestre de 2024 y un 0.5% en comparación con el mismo trimestre de 2024, según la última estimación de la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio.
Finalmente, el International Business Report de Grant Thornton muestra que la guerra comercial también está afectando las expectativas de exportación del ‘middle-market’, particularmente en regiones como Asia Pacífico, donde ‘el porcentaje de empresarios procedentes de esta zona que prevé incrementar sus exportaciones se ha desplomado nueve puntos porcentuales, hasta el 42%’, mientras que este mismo indicador se mantiene ‘estable’ en Norteamérica (59%) e incluso aumenta dos puntos porcentuales en la Eurozona, hasta el 45%’.
















