El informe ‘Situación del Mercado Asegurador’ de WTW proyecta un panorama ‘estable’ para el sector asegurador en España durante el segundo semestre, a pesar de experimentar descensos moderados en las tasas de diversas líneas de seguros y mejoras en las condiciones de los programas. Según el estudio, esta dinámica se atribuye a una ‘fuerte competencia’ y a un exceso de capacidad en el mercado.
Comparando con el semestre anterior, se observa un incremento en la siniestralidad en sectores ‘clave’ como automóviles, salud y multirriesgo, lo que ha presionado los márgenes técnicos del sector. No obstante, las primas experimentaron un crecimiento interanual del 6,8%, sumando un total de 22.685 millones de euros en el primer trimestre, con 13.630 millones provenientes del negocio de No Vida y 9.055 millones del sector de Vida.
La colaboración con insurtechs y la adopción de nuevas tecnologías como la inteligencia artificial y el análisis de datos son consideradas ‘esenciales’ por WTW para incrementar la eficiencia en el sector. Sin embargo, la firma advierte sobre los riesgos cibernéticos, que han llevado a las aseguradoras a intensificar sus sistemas de protección y la formación interna.
El estudio también destaca la integración de criterios ambientales, sociales y de gobernanza como una ‘prioridad’ en el mercado asegurador, enfocada tanto en la gestión de riesgos climáticos como en la conformidad con nuevas regulaciones.
WTW identifica dos dinámicas distintas dentro del sector: mientras que los riesgos ‘bien gestionados y protegidos’ están logrando renovaciones más favorables, los sectores con alta exposición aún enfrentan condiciones más exigentes y ajustes en las coberturas. A pesar de esto, las renovaciones tienden ‘hacia la estabilidad’ en riesgos bien administrados, y los acuerdos a largo plazo siguen siendo una constante en un mercado competitivo pero volátil.
Los principales riesgos percibidos por las empresas en España para 2025 incluyen catástrofes naturales, ciberataques, interrupciones de negocio y desafíos regulatorios, con la inflación continuando como una preocupación central para el sector en los próximos meses.
















