El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha sugerido a Brasil seguir eliminando gradualmente el impuesto sobre las transacciones financieras para fortalecer su política fiscal, justo un día después de que el Tribunal Supremo de Brasil apoyara una medida del presidente Luiz Inácio Lula da Silva que aumentaba estos impuestos.
Según el informe emitido tras la revisión del Artículo IV para Brasil por parte del Directorio Ejecutivo del FMI, se enfatiza también en la implementación de la reforma del IVA en curso para simplificar el sistema tributario y fomentar la productividad.
El FMI también ha propuesto reformas del IRPF para incrementar la progresividad del sistema tributario y la generación de ingresos internos. Un marco fiscal mejorado con un sólido anclaje a medio plazo reforzaría la credibilidad y la sostenibilidad, detalla el informe.
Alejandro de Moraes, magistrado del Tribunal Supremo, restauró la mayor parte del decreto de Lula sobre el impuesto IOF que había sido revocado previamente por el Congreso en junio.
El gobierno brasileño está tomando medidas, incluyendo el aumento de los impuestos en ciertas transacciones financieras, para reducir el déficit público que en abril alcanzó el 7,92% del PIB, contando el pago de los intereses de la deuda pública. A finales de mayo, los ministerios de Hacienda y de Planificación anunciaron un congelamiento de gastos por 31.300 millones de reales (4.900 millones de euros) con el objetivo de equilibrar las finanzas del país.
MODERACIÓN DEL CRECIMIENTO ECONÓMICO
Los directores ejecutivos han reconocido la mejora en la economía brasileña, que muestra una reducción del desempleo y de la pobreza en los últimos tres años, aunque recientemente se ha notado una moderación.
El FMI anticipa que el crecimiento económico de Brasil se reducirá del 3,4% en 2024 al 2,3% en 2025, en un entorno de condiciones monetarias y financieras restrictivas, una disminución del apoyo fiscal y una creciente incertidumbre política global. A mediano plazo, se espera una recuperación hasta el 2,5%, apoyada por la normalización de la política monetaria y factores como la reforma del IVA y el aumento en la producción de hidrocarburos.
En cuanto a la inflación, el FMI proyecta que llegará al 5,2% a finales de 2025, antes de aproximarse gradualmente al objetivo del 3% al final de 2007. El último dato disponible, del mes de junio, registró una inflación del 5,35% interanual, mientras que los tipos de interés se sitúan en el 15%.