De acuerdo con el último número de ‘Panorama Social’, una publicación de Funcas, los impuestos y las prestaciones públicas logran disminuir aproximadamente un tercio la desigualdad de renta en España.
La revista, que celebra su vigésimo aniversario, ha centrado su edición especial en el análisis de la desigualdad, un tema que ha ganado prominencia en las discusiones académicas y políticas.
Julio López Laborda, catedrático de Economía Pública en la Universidad de Zaragoza, discute en esta publicación el papel del sector público en la mitigación de las desigualdades de ingresos y riqueza mediante impuestos y ayudas sociales.
El informe detalla que los tres quintiles con menores ingresos reciben más en prestaciones de lo que contribuyen en impuestos, mientras que los dos quintiles superiores son contribuyentes netos, aunque la progresividad disminuye entre los más acaudalados (el 1% de mayor renta).
A pesar de que la intervención estatal no es progresiva en toda la escala de ingresos, el estudio subraya que el conjunto de impuestos y prestaciones logra un efecto redistributivo significativo, reduciendo la desigualdad de renta en un 32,5% para el conjunto de los hogares.
Esta cifra es inferior al promedio de los países de Europa occidental, donde la intervención gubernamental corrige en un 40% la disparidad de ingresos.
El documento también señala que las prestaciones monetarias son el mayor mecanismo redistributivo en España, con las pensiones y otras transferencias constituyendo el 72% de la reducción total de la desigualdad, por encima del impacto de los impuestos (2,8%) y las prestaciones en especie (25,2%).
Incluyendo otros gastos públicos como defensa y protección social, la reducción de la desigualdad en 2022 podría alcanzar casi el 36%, argumenta el autor.
En comparación, la contribución de los impuestos a la reducción de la desigualdad en España (2,8%) es menor que el promedio en países de Europa Occidental, donde alcanza el 10%.
