Durante el recién inaugurado ‘Futura Summit’, anteriormente conocido como ‘ESG Summit’, se ha hecho énfasis en la urgencia de evolucionar desde el concepto tradicional de sostenibilidad hacia un modelo de crecimiento regenerativo. Este nuevo enfoque busca no solo reducir los impactos negativos de la actividad humana, sino también fomentar un efecto positivo y perdurable en el entorno.
Mónica Rico, cofundadora del evento, ha expresado: “Futura es nuestra promesa de enfocarnos en lo que realmente importa, la construcción. Es acción, innovación e impacto tangible. Es sobre el futuro que estamos creando juntos ahora mismo, porque no es solo un nuevo nombre, es nuestra misión”.
En la apertura del foro, María Jesús Romero de Ávila Torrijos, directora general de Economía del Ayuntamiento de Madrid, destacó el compromiso del gobierno local con la innovación y la colaboración público-privada para alcanzar un futuro regenerativo donde la competitividad se mide a través de la sostenibilidad.
El debate titulado ‘Embracing Complexity: Unleashing the Power of Regenerative Thinking’ contó con la presencia de John Elkington y Marga Hoek, quienes discutieron la transición de la sostenibilidad incremental a un pensamiento regenerativo capaz de transformar los sistemas económicos, sociales y medioambientales. “Creo que estamos en el punto en que tenemos una gran oportunidad”, afirmó Hoek, resaltando la importancia de la tecnología en alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible.
Por su parte, Clara Arpa, presidenta de la Red Española del Pacto Mundial, defendió la sostenibilidad como una estrategia esencial no solo ética, sino también rentable y competitiva para las empresas, lo que permite una gestión efectiva de los riesgos y una resiliencia organizacional en contextos volátiles. “Llevar la transformación hacia competitividad sostenible no es opcional. Es el único camino para asegurar una prosperidad inclusiva”, concluyó Arpa.