Gana Energía, principalmente participada por Repsol, logró una facturación de 217 millones de euros en 2024, un aumento del 14% en comparación con los 190 millones de euros en 2023 y tiene como expectativa incrementar sus ingresos netos a 230 millones de euros durante este año.
El Ebitda de la empresa se mantuvo en 500.000 euros al cierre del año, en un entorno económico marcado por la fluctuación de los precios de la energía y la presión inflacionaria, según comunicó la empresa.
Desde su inicio hace una década en España, la compañía ha experimentado un crecimiento del 20% en su base de clientes, «ratificando la solidez de su modelo de negocio».
OBJETIVO DEL MILLÓN DE CLIENTES
Antonio Picazo, CEO de Gana Energía, afirmó que la firma está «100% enfocada» en ampliar su cartera de clientes, «con el objetivo del millón de clientes en el horizonte» desde los más de 350.000 actuales.
«Esta prioridad estratégica se traduce en un incremento sostenido de la facturación, pero sin perder de vista la sostenibilidad de las operaciones. Aspiramos a poder llevar energía al mayor número de clientes posible al menor coste, manteniendo como única fuente de financiación a nuestros propios clientes», explicó.
En el último año, la compañía ha centrado sus inversiones en la digitalización y en atraer y retener nuevos clientes, lo que es fundamental para su estrategia de crecimiento y competitividad.
EBITDA DE ENTRE 2 Y 3 MILLONES EN 2025
Para 2025, Gana Energía estima que el Ebitda se sitúe entre dos y tres millones de euros, lo que refleja un futuro de crecimiento estable y continuado.
Además, la empresa planea seguir aumentando su base de clientes y reforzar su rentabilidad, apoyándose en una inversión constante y en el fortalecimiento de su propuesta de valor.
En términos fiscales, Gana Energía contribuyó con 28 millones de euros en concepto de IVA y siete millones por el Impuesto Eléctrico y de Hidrocarburos, además de 1,7 millones de euros a la Seguridad Social.