El conglomerado International Airlines Group (IAG), matriz de Iberia, British Airways y Vueling, comenzó la jornada bursátil de este viernes con un descenso del 6,5% en su cotización, alcanzando los 4,4 euros por acción. Este movimiento en el mercado se produce a pesar de los resultados financieros del tercer trimestre de 2025, que reflejan un incremento del 18,3% en el beneficio de explotación durante los primeros nueve meses del año, sumando un total de 3.931 millones de euros.
Antes de esta apertura, el jueves las acciones de IAG ya habían sufrido una disminución del 2,61%, cotizando a 4,707 euros por acción después de perder 0,126 euros respecto al cierre anterior, afectadas por la inestabilidad en el sector aéreo debido a los costes de combustible y la demanda en rutas transatlánticas.
Los inversores parecen penalizar a la compañía por una caída del 2,4% en los ingresos unitarios de pasajeros y un entorno macroeconómico lleno de incertidumbres, a pesar de mostrar una operativa robusta y un aumento en la capacidad.
Durante el periodo de nueve meses finalizado el 30 de septiembre, los ingresos totales de IAG se incrementaron un 4,9% hasta alcanzar los 25.234 millones de euros, impulsados por un aumento del 3,4% en los ingresos de pasajeros (22.034 millones) y un 4,8% en carga (912 millones). Sin embargo, los «otros ingresos» experimentaron un notable aumento del 22,4% gracias a la iniciativa IAG Loyalty.
El beneficio de explotación antes de partidas excepcionales se elevó un 18,3% hasta los 3.931 millones, con un margen del 15,6% (+1,8 puntos), y el beneficio ajustado por acción aumentó un 27% a 55,5 céntimos de euro.
En el tercer trimestre, pese a que los ingresos totales se mantuvieron estables en 9.328 millones de euros, la compañía enfrentó un descenso del 6,9% en carga, aunque fue parcialmente compensado por un incremento del 3,6% en otros ingresos. Los ingresos unitarios de pasajeros por AKO cayeron un 2,4% (a 8,65 céntimos), afectados por fluctuaciones de tipos de cambio y una reducción en la demanda en el Atlántico Norte, aunque mercados como Latinoamérica y Asia-Pacífico mostraron resistencia.
En términos de capacidad, IAG aumentó los asientos-kilómetro ofertados (AKO) un 2,6% en nueve meses hasta 265.587 millones, y un 2,4% en el trimestre (95.537 millones), con una ocupación del 88,6% (-1,3 puntos).
El control de costes ha sido fundamental: el coste unitario excluyendo combustible solo aumentó un 0,2% en el trimestre, con mejoras significativas en gastos de proveedores y personal. El gasto en combustible se redujo un 8,8% (1.874 millones), contribuyendo a un beneficio operativo trimestral de 2.053 millones (+2%) y un margen del 22% (+0,4 puntos).
El apalancamiento neto se mantuvo en 0,8 veces, con una liquidez total de 11.442 millones de euros, y el grupo ha completado el 95% de su programa de recompra de acciones por 1.000 millones de euros, anunciando además un dividendo a cuenta de 0,048 euros por acción.
Luis Gallego, consejero delegado de IAG, destacó los «fuertes resultados» y la trayectoria hacia «otro año de crecimiento», manteniendo intactas las perspectivas: una capacidad anual aumentada en un 2,5%, un incremento del 3% en costes unitarios ex combustible, inversiones por 3.700 millones y un presupuesto de combustible de 7.100 millones.
Las reservas para el cuarto trimestre son «positivas», y la demanda de viajes «continúa fuerte», aunque el grupo advierte sobre los riesgos macro y geopolíticos existentes.










