La cadena de suministro de la industria aeronáutica enfrenta dificultades y retrasos que se traducirán en un impacto económico superior a los 11.000 millones de dólares (9.500 millones de euros) para el año 2025, de acuerdo con un análisis realizado por la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) junto con la consultora Oliver Wyman.
El estudio abarca los desafíos generales de la industria y explora en profundidad las razones detrás de estos problemas y cómo afectan a las aerolíneas. Durante 2024, los pedidos de aeronaves comerciales alcanzaron cifras récord con más de 17.000 unidades solicitadas, impulsados por la necesidad de las aerolíneas de actualizar o expandir sus flotas. Sin embargo, los retrasos en las entregas obligan a las compañías a postergar sus planes de expansión o a mantener en uso aviones más viejos, incrementando así los costos operativos.
Se estima que los retrasos en las entregas aumentarán los costos de combustible en aproximadamente 4.200 millones de dólares (3.600 millones de euros) y los costos de mantenimiento en unos 3.100 millones de euros. A esto se añadirán 2.600 millones de dólares (2.246 millones de euros) en costos adicionales por el alquiler de motores y un impacto de 1.400 millones de euros en el almacenamiento de inventarios.
Además de los desafíos económicos, la incapacidad de la industria para satisfacer la demanda creciente se hace evidente. En 2024, el aumento del 10,4% en la demanda de pasajeros superó el crecimiento de la capacidad, que fue del 8,7%, llevando los índices de ocupación al récord histórico del 83,5%, con expectativas de que esta tendencia ascendente se mantenga durante 2025.